Sanidad
Un tercio de los pacientes que llegan a Urgencias procede de los ambulatorios
La presión asistencial es de 360 usuarios al día en un servicio que se reformará en diciembre
El servicio de Urgencias recibió casi 136.000 pacientes el año pasado. marciano pérez
El servicio de Urgencias del Hospital de León recibió 135.548 enfermos el año pasado. Más de 360 pacientes al día de media que elevan la presión asistencial hasta el 65%. Sin embargo, pocos de los atendidos requirió ingreso, sólo el 16%. Al analizar el movimiento que registra este servicio en un intento de aliviar el flujo de personas que acuden a las urgencias hospitalarias, los responsables sanitarios han comprobado que un tercio de los usuarios fueron derivados desde los ambulatorios, según el Observatorio de salud de Castilla y León.
Por eso, el nuevo gerente de Área, Juan Luis Burón, es partidario de convertir los centros de salud en instalaciones más atractivas para los pacientes, de modo que no se sobrecarguen las Urgencias del Complejo Asistencial Universitario de León (Caule) para asuntos que se podrían tratar en los ambulatorios. «Tenemos que trabajar más a pie del profesional, y abrir esas vías, esos puentes de comunicación con Atención Primaria para intentar que nos comuniquemos más de alguna forma y abordar los asuntos comunes», señala.
El servicio está a la espera, además, de una reforma cuyo inicio está fijado en diciembre, según anunció en León la consejera de Sanidad, Verónica Casado.
Las obras afectarán a un entorno de 1.000 metros cuadrados y se ejecutarán con 800.000 euros. Permitirán renovar el servicio de Urgencias actual, además de ampliar las instalaciones en 400 metros cuadrados para ganar una sala de espera para los familiares de los pacientes.
Para ello se aprovechará el espacio exterior de aparcamiento de las ambulancias y se desplazará la zona de estacionamiento de esos vehículos unos metros hacia adelante. El proyecto valora esa primera fase, que debía haberse acometido el año pasado, en 300.000 euros. En la segunda, la previsión es mejorar los itinerarios interiores, lo que implica que las consultas del servicio y el área de admisión de enfermos se muevan para situarse anexas a la sala de espera.
En su lugar se concentrará el trabajo administrativo de Urgencias y el triaje de los pacientes que llegan. También se habilitará una sala de espera independiente para la consulta de Psiquiatría y códigos de acceso a todas las puertas interiores para evitar que la zona de consultas y la de boxes se saturen con personal ajeno al cuidado de los pacientes en observación.
Una de las claves de la reforma que se plantea, tras 19 años sin intervenciones de renombre en Urgencias, es lograr mayor intimidad para los enfermos. De ahí que los nueve boxes dobles se vayan a individualizar.
Los profesionales del servicio realizan grandes esfuerzos para poder atender a los pacientes. En momentos conflictivos, como la época de la gripe, se producen colapsos que se intentarán paliar con nuevas pautas.
Según el último informe del Defensor del Paciente, Urgencias es uno de los cinco servicios más denunciados del Hospital por la elevada espera. También señala que a veces la lista para triar acumula 40 personas, «lo que supone no prever la gravedad de la consulta hasta pasada al menos una hora».