UGT pide crear 47 puestos en el Hospital y dar estabilidad a la plantilla flotante
El sindicato aprecia que sobre todo se necesitan enfermeras, TCAEs, psicólogos y celadores
Urgencias es un servicio que necesita personal, según UGT.
Texto a plantilla flotante del Hospital de León, la que sirve para cubrir las bajas, permisos y vacaciones del personal que trabaja en las gigantescas instalaciones de 126.000 metros cuadrados, «es inestable», según UGT y «necesita mejoras». El sindicato considera que es «urgente» sumar al menos otros 47 puestos a la plantilla orgánica para un correcto funcionamiento laboral y que se puedan solventar todos los imprevistos de los trabajadores del Hospital dentro de unos turnos y cargas de trabajo adecuados. «Los integrantes de la plantilla flotante están soportando continuos cambios de turnos de un día para otro, lo que dificulta su conciliación laboral y familiar y les añade jornadas maratonianas», señala el sindicalista Javier Fernández.
Para «racionalizar» el trabajo en el Complejo Asistencial Universitario de León, donde ya trabajan 4.350 personas, UGT ha detectado que se necesitan al menos cuatro psicólogos más (dos para los equipos de la calle Independencia, uno para el equipo de Salud Mental de San Antonio Abad y uno para La Condesa), otros tres empleados en administración un técnico de rayos en turno de noche, dos de mantenimiento, un cocinero, quince enfermeras (una de tarde en cada una de las nueve unidades de hospitalización quirúrgica, una en Virgen Blanca y cinco en Urgencias), quince TCAEs (técnicos en cuidados auxiliares en enfermería), cinco celadores y un trabajador para almacén.
Una propuesta que trasladarán al gerente del Hospital en busca de un consenso y de actualizar la plantilla de un complejo con catorce servicios médicos, otros catorce quirúrgicos y doce centrales. «El gerente es una persona dialogante y receptiva. Veremos qué se puede hacer», explica Fernández.
USO y Urgencias
Hace una semana, el sindicato USO logró eco a su reivindicación para cubrir la baja de la supervisora de enfermería de Urgencias, tras reunirse con la dirección, ya que el resto de profesionales estaban asumiendo ese trabajo desde hacía casi mes y medio. También se reforzó el área con una enfermera y un TCAE para amortiguar el incremento de pacientes que se registran estas fechas de virus catarrales y gripe. Por su parte, Csif reclama para los TCAEs, el reconocimiento de la formación, las funciones y el trabajo real que realizan, así como la categoría profesional del grupo C1 (ahora está en el C2), al ser la que se corresponde con una formación profesional de grado superior.