UGT reclama un plan de emergencia «con medidas sensatas» para las aulas

El sindicato UGT reclamó ayer a la Junta de Castilla y León un plan escolar de emergencia con «medidas sensatas» para prevenir un repunte de contagios de la covid-19 en la vuelta al colegio y ante los efectos de la ola de nieve y frío. La secretaria de Enseñanza del sindicato a nivel autonómico reclama a la Consejería de Educación «un plan de emergencia» para prevenir los contagios en la vuelta al colegio ante el repunte de los casos de coronavirus en la sociedad y para proteger a los alumnos y al profesorado de las bajas temperaturas y de posibles accidentes originados por la nieve y el hielo.

Para Beatriz García, ante la ola de nieve y frío, «es prioritario evitar accidentes de tráfico y en los accesos peatonales a los centros, y problemas en las rutas escolares de autobuses», por lo que echa en falta de medidas para la vuelta a las aulas, tanto para frenar la propagación de la pandemia en los centros educativos, como para proteger al alumnado y al profesorado de las bajas temperaturas.

La secretaria de Enseñanza de UGT considera que «en estos momentos, está en riesgo la salud del alumnado y del profesorado» y exige a las consejerías de Educación y de Sanidad «que asuman sus responsabilidades y que tomen las medidas que garanticen la salud y la minimización de riesgos de toda la comunidad educativa».

Los profesores continúan alzando la voz para exigir que se refuercen las medidas de seguridad en el aula y que se tenga en cuenta que el frío invernal dificulta abrir constantemente las ventanas para garantizar la ventilación.

Por otra parte, la consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, rechazó ayer el uso de purificadores de aire en las aulas para prevenir los contagios de covid en este ámbito y, en cambio, defendió la instalación de detectores de dióxido de carbono (CO2) anunciados por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que indicarán cuándo es necesario abrir las ventanas para ventilar.

Preguntada por la demanda de algunos sindicatos de docentes y asociaciones de padres para instalar purificadores en lugar de los detectores de dióxido de carbono, Casado afirmó: «El mejor purificador es la ventilación». En este sentido, la consejera aseguró que los purificadores no han sido propuestos en ningún momento por Salud Pública como alternativa eficaz para la prevención de contagios en las aulas, mientras que en la reunión de la pasada semana los expertos sí recomendaron a la Junta instalar estos detectores de dióxido de carbono.