Villaquilambre cierra el anillo del Bernesga al Torío con una ciclovía que cruza la N-630

Dieciséis años después de que comenzaran a dibujarse sobre el mapa las conexiones ciudadanas para bicicletas , el Ayuntamiento de Villaquilambre impulsa un nuevo tramo de casi ocho kilómetros en su municipio que permitirá cerrar el anillo que sella el enlace entre las riberas del Torío y el Bernesga.

Un ambicioso proyecto cuya redacción ya está licitada y que supone salvar el escollo de la carretera nacional a Asturias , la N-630, a la altura del polígono, para que ciclistas y caminantes puedan cruzar al vecino Sariegos y entroncar después con León aprovechando uno de los pulmones verdes más majestuosos de la capital y su alfoz, el Monte San Isidro .

El Torío y el Bernesga ya estaban conectados al Sur a través de Puente Castro y La Candamia, pero faltaba medio anillo de vuelta al Norte desde Villanueva del Árbol en que concluye actualmente el carril-bici de Villaquilambre.

Ahora, la idea es girar desde Villanueva a Villarrodrigo por un pasillo paralelo al canal de riego de Villasinta, atravesar esa localidad por detrás por unos caminos vecinales para llegar al pueblo de Villaquilambre en su parte alta y enfilar por la cuesta del cementerio hacia Navatejera hasta el polígono industrial de la zona. Para superar la barrera de la carretera N-630 se barajan dos opciones, una pasarela superior sobre los carriles o utilizar el paso subterráneo de acceso al propio vivero para entroncar con el camino de servidumbre del Cueto del Moro de Carbajal de la Legua. Y desde esa localidad de Sariegos se retomaría ya la senda del Bernesga hacia León.

La iniciativa se expuso en la Mancomunidad de Interés General y cosechó la aprobación de los municipios implicados y de la Diputación, propietaria de parte del Monte San Isidro. La intención es presentar el proyecto a financiación europea a través de los fondos Next Generation .

Villaquilambre estrenó todo el tramo de 7,5 kilómetros del carril-bici junto al Torío desde Villaobispo a Villaneva en enero de 2010. Un proyecto de 700.000 euros que se había iniciado cuatro años atrás y que, tras superar varias trabas, se pudo abrir oficialmente al público hace doce años. Esa ciclovía se construyó en dos fases. La primera, de 3,5 kilómetros, estaba operativa desde el 26 de febrero de 2009 y la segunda, de cuatro kilómetros, fue inaugurada en 2010 durante el mandato de Lázaro García Bayón. La obra fue uno de los 21 proyectos del municipio que se incluyeron en la subvención de 2,66 millones de fondos estatales, que también se utilizaron para abastecimiento, seguridad vial, aceras y parques biosaludables.

Con la ciclovía, el Ayuntamiento pudo recuperar una zona muy degradada por los matorrales , además de ofrecer a los vecinos una oportunidad para practicar deporte. Por eso el carril-bici se completó con una senda peatonal de zahorra artificial que entronca con el camino abierto por León desde la ribera del Bernesga a la altura del parque de La Candamia y prosigue hacia Puente Castro, el Coto, el Hispánico, San Marcos y San Juan de Dios (área 17).

El nuevo tramo cerrará el círculo con un único gran paseo que recorrerá ambos ríos por los municipios de León, Villaquilambre y Sariegos.

Además, Villaquilambre y León también se abrazan con un carril-bici interior desde la carretera de Santander que salta la ronda Este para conectar los dos municipios por la Serna. El concejal de Medio Ambiente, Ricardo de Dios, admite que recuperar zonas degradadas y potenciar el uso de la bicicleta y los paseos es un objetivo «clave» por el que trabaja Villaquilambre, que también impulsa con 600.000 € el reacondicionamiento de los parques y zonas verdes del municipio.