Diario de León

Villaquilambre zanja la pesadilla del Polideportivo

El Ayuntamiento asume la gestión para relanzar el pabellón y rescata a los 17 empleados de un largo Erte

Trece de los 17 trabajadores del Polideportivo (abajo), con parte del equipo de Gobierno (arriba). P.I.

Trece de los 17 trabajadores del Polideportivo (abajo), con parte del equipo de Gobierno (arriba). P.I.

León

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El suspiro de alivio que lanzaron ayer los 17 trabajadores del Polideportivo de Navatejera tras sellarse el traspaso de la gestión de las instalaciones de manos de la junta vecinal como propietaria del edificio, al Ayuntamiento de Villaquilambre, se escuchó con fuerza en todo el salón de plenos.

No es para menos. El acuerdo da futuro a unas familias que solo veían nubarrones en el horizonte y que intentaron no zozobrar durante dos años agarrados a un Erte.

El apretón ha costado «sudor y lágrimas», según reconocen las partes implicadas, pero permite la subrogación municipal de los 17 empleados, que empiezan hoy mismo a trabajar en la limpieza y mantenimiento del pabellón, «para ponerlo en marcha cuanto antes. Ojalá esté en Semana Santa», comentaron. El Ayuntamiento, además de rescatar a la plantilla, pretende darle la vuelta a las malas cifras de la infraestructura deportiva, que arroja un déficit de 200.000 euros por unos gastos de 600.000 euros frente a ingresos de 400.000, destacó el concejal de Hacienda, Lázaro García Bayón, quien apuesta por relanzarlas con mejoras, actividades, ampliación del gimnasio y placas solares.

Los trabajadores agradecieron al equipo de gobierno haberles «ayudado en todo momento en que no sabíamos por dónde tirar cuando nos atenazaba la angustia por no cobrar». También, que les abrieran las puertas de los despachos «sin cita, con una empatía que en esos momentos era necesaria», explicaron. El alcalde, Manuel García, acompañado del teniente de alcalde, Ricardo de Dios, rubricó el documento con representantes de los trabajadores y la presidenta de la pedanía, Berta Llamazares, quien reconoció que la pandemia puso la puntilla a la situación difícil que arrastraba el Polideportivo. El regidor admitió que el proceso de traspaso ha sido «muy complejo» y valoró como «fundamental» el trabajo de los técnicos para llegar a sellar la cesión. A su juicio, recuperar la instalación «termina con el sufrimiento de las familias». El documento se fija «mejorar la calidad de vida de los vecinos de Villaquilambre» y también supone proseguir con los contratos de suministros y de servicio con los que actualmente funciona la instalación hasta su vencimiento.

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