Audi A8. Tecnología… de altura
Lujo tecnológico con nuevo equipamiento
JAVIER F. ZARDÓN
‘Item… más’. Parecía difícil aumentar el empaque del A8… Audi, tampoco está vez, se ha parado en barras… ni siquiera en las de su nueva parrilla frontal, ahora ensanchada y con una cromada posibilidad opcional; eso, y que cada grupo óptico delantero incluye ‘solamente’… 1,3 millones de microespejos que permiten modificar la forma del haz luminoso.
Descendiente, por vía directa, del V8, el Audi A8, inicialmente lanzado en 1994, se ha mantenido siempre como un modelo ‘marginal’… sólo en su volumen de ventas porque, en empaque, resulta ser todo un escaparate (tecnológicamente lujoso) para su fabricante que, a lo largo de cuatro generaciones, ha venido cuidando —amorosamente— la puesta en escena.
Por aquello de ‘los experimentos’ y ‘la gaseosa’… nuestro protagonista no es muy dado a veleidades estilísticas en lo que a cambios —¿drásticos?— se refiere; así que, las modificaciones son tan sutiles como ‘casi’ imperceptibles: nuevas firmas lumínicas delantera y trasera, llamativos remates cromados y marcadas personalidades estéticas en los acabados S Line y en el deportivo S8; total… 5,19 metros de largo y 1,95 de ancho con, lo mejor, ‘esos’ 3 redondos metros de batalla que, como fácilmente puede suponerse, resultan ser la clave un interior… ‘así’ de grande y lujoso; ‘item más’, los 5,45 metros totales de la versión L Horch, guiño semántico a una de las marcas integrantes de ‘aquellos’ cuatro aros de Auto Union (DKW, Horch, Wanderer… y Audi), acaban por convertirlo en un auténtico salón rodante: dos butacones traseros individuales regulables hasta la ‘extenuación’ (reposapiés, masaje…) y con hasta dos ‘tablet’ de 10,1 pulgadas, también individuales… por descontado.
El actualizado A8 despliega, en cuatro variantes, su abanico motorístico europeo: V6 de 3.0 TDI (286 CV) y V8 4.0 TFSI (340 CV) en la ‘zona baja’, además del V8 Biturbo TFSI de 571 CV (3,8 segundos de cero a cien) y, para ‘redondear’, muy con los tiempos, la versión híbrida enchufable 60 TFSIe de 462 CV.
Unidos, todos ellos, al cambio Tiptronic de —¡cómo no!— 8 relaciones, a la tracción Quattro —¡pues claro…!— y al diferencial central autoblocante —¡no vaya a ser…!—, opcionalmente complementado con el diferencial deportivo (de serie en el S8 y nunca disponible en el híbrido).
Así que, si quieren más… avisen; aunque resultará ‘bastante’ difícil obtener ‘algo’ más.
El A8 sigue manteniendo su —renovado— estatus de buque insignia… en el catálogo de los ‘Cuatro Aros’.