Diario de León

Citroën CX. 30 años… en la memoria

DM18P4F4-19-44-04-5.jpg

DM18P4F4-19-44-04-5.jpg

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Audaz y con estilo, así fue considerado en su día. También como un automóvil capaz de plantar cara, con una respuesta creativa, a los problemas de su época… crisis del petróleo incluida.

Así, el Citroën CX ha marcado la historia del automóvil con hitos como la adopción de un motor turbodiesel, una versión GTi de altas prestaciones, el confort de la suspensión hidroneumática o la ergonomía de su puesto de conducción.

En España, el CX representó un importante salto industrial, y comercial, en su condición de primera berlina de lujo fabricada aquí.

Citroën desvelaría el «CX 2000» en el Salón del Automóvil de París en 1974, destacan rápidamente por su confortabilidad y su excelente comportamiento rutero; aunque, ante todo, el CX era «hijo de su tiempo»: en 1973, la crisis del petróleo —la primera de ellas— acabaría con la era del combustible barato en Europa, lo que obligaría a los fabricantes a considerar el consumo como uno de los factores claves a la hora de desarrollar sus modelos… el ‘chevron’ apostaría por la incorporación de tecnologías como la del optimizado motor diésel, que propiciaba consumos más recortados que sus homólogos de gasolina con —‘casi’— idéntico placer de conducir; el CX superó el reto: 930 kilómetros, de París a Niza, sin repostar.

La aerodinámica —de ahí su denominación— tampoco fue ajena a esa estrategia: baja resistencia al aire, inmediatamente traducida en las rebajas de consumo.

Unánimemente reconocido por su diseño, obra de Robert Opron, el CX revolucionó, por confort y ergonomía, el panorama automovilístico: la suspensión hidroneumática propiciaba una corrección automática de la altura de la carrocería, además de un mejor comportamiento en carretera; el CX sustituía el chasis tradicional por una plataforma y una carrocería solidarias, atenuando ruido y vibraciones. En 1985, fue el primer automóvil francés en equipar frenos con ABS.

Mención aparte merece su innovador puesto de conducción, precursor del hoy celebrado ‘Citroën AdvancedComfort’ que, creado por Michel Harmand, constituye un compendio de espíritu práctico y sentido estético al situar todos los mandos del vehículo al alcance de la mano para el conductor, con lo que puede accederse fácilmente a la información necesaria merced a un cuadro de instrumentos en forma de media luna; primer paso de una filosofía que sigue muy presente —vigente— en los Citroën actuales.

A lo largo de si vida comercial, el CX amplió su catálogo con versiones Break (1975) y el deportivo 2400 GTi con inyección electrónica (1977), además de la serie ‘Prestige’ (28 centímetros más largo, 1978). Hasta 1991, el CX contabilizó 1,2 millones de unidades, fabricándose en Francia, en Chile y en España (Vigo).

Ahora, tres décadas después del cese de su producción, el CX sigue levantando pasiones entre los amantes al coleccionismo de coches clásicos… como el ‘coleccionable’ GTi Turbo.

tracking