Coches ‘desconfinados’

Después de meses en ‘dique seco’, conviene revisar nuestro automóvil para que todo esté… ‘en perfecto estado de revista’. Incluso desinfectarlo por dentro y por fuera, para eliminar posibles virus.

Ahí van cuatro recomendaciones para cuando todo vuelva ‘a rodar’… como antes.

Los niveles: Antes de ponerse en marcha deben comprobarse los niveles del líquido refrigerante y del aceite del motor. Por mucho que no se encienda control alguno en el cuadro de instrumentos, nunca está de más ‘tirar de la varilla’.

Las presiones: Con el paso de los días, y al no haber rodado, la presión de los neumáticos habrá disminuido, por un proceso de permeabilidad, que se traduce en la pérdida de ‘un poco’ de aire cada día; fenómeno, curiosamente, más habitual con la llegada del buen tiempo. Incluso el propio peso del coche, podría dañar la goma del neumático si tiene la presión baja.

Doble ‘check’: Siempre resulta aconsejable realizar ‘una ronda’ alrededor del coche, antes de ponerlo en marcha, para comprobar los elementos que se utilizan habitualmente en la circulación (luces, intermitentes, elevalunas, limpiaparabrisas, dispositivos electrónicos…). Eso, y además de pisar el pedal del freno para comprobar que está firme, constatar que no se escucha ningún ruido anómalo al arrancar el coche.

Por fin… a desinfectar: Limpiar el vehículo, con especial atención en las zonas de mayor contacto interiores y exteriores, como volante, palanca del cambio, pantalla táctil, elevalunas; habida cuenta que el salpicadero ‘puede’ ser uno de los focos más importantes de contaminación (toses y estornudos), incluso las alfombrillas acumulan suciedad al —lógicamente— pisarlas. Tampoco hay que descuidar la limpieza —un pincel siempre es útil— de las rejillas de aireación, evitando así que se obstruyan. En el exterior, además de las manillas de las puertas, las ventanillas, incluso la superficie de las puertas, se tocan, habitualmente, con mucha facilidad; así que, el tren de lavado… nos espera.

En suma, un poco de paciencia, antes de arrancar… ‘desconfinará’ el coche sin mayores problemas, dejándolo listo para volver a rodar.