Diario de León

Diseño «a la carta»

Jaguar y Land Rover planean crear, y compartir, una plataforma virtual para el desarrollo y puesta a punto de sus futuros modelos. La utilización de herramientas de diseño CAD y realidad virtual llegan a acortar hasta en un 25% los procesos de diseño.

Las imágenes en alta resolución permiten «conducir» desde el interior del vehículo.

Las imágenes en alta resolución permiten «conducir» desde el interior del vehículo.

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Fábrica… virtual. Según Brian Waterfield, responsable del Centro de Realidad Virtual de JRL (Jaguar y Land Rover), la compañía proyecta crear una fábrica virtual para que la totalidad del proceso de montaje de los futuros vehículos (eficiencia, ergonomía, calidad…) pueda evaluarse «al milímetro».

Un proceso que se complementará con un simulador de conducción virtual, que también incluirá un interface hombre/máquina y la capacidad de producir fotografías «realistas» en 3D y filmaciones que se utilizarán posteriormente en labores de comunicación y marketing.

En siguientes etapas, JLR pretende seguir evolucionando hacia lo que será el futuro cercano de la realidad virtual en el sector de automoción: la tecnología táctil, que permitirá «tocar» y «sentir» virtualmente situaciones aplicadas a la conducción, una técnica que ya se está utilizando quirúrgicamente.

El objetivo —según Wa-terfield— es llegar a crear una plataforma virtual completa para la fabricación de modelos «reales», que se construirían sin necesidad de desarrollar prototipos «auténticos».

El poder de los ordenadores y de nuevas aplicaciones como la realidad de aumento están ganando terreno por lo que, antes de lo que pensamos, llegará el día en que podamos producir, literalmente, un coche completo desde una pantalla.

La utilización del diseño CAD en ingeniería y fabricación no es nada nuevo; se trata de una técnica ampliamente utilizada en el sector automovilístico, naviero, aeroespacial e industrial, aunque también en otras disciplinas, como la arquitectura o la medicina, desde principios de los años ochenta. Aunque la complicada situación económica actual ha hecho que muchas compañías reenfoquen su atención hacia las prácticas del diseño virtual y valloren sus nuevas posibilidades: el software CAD puede llegar a acortar en un 25% los ciclos de diseño; disminuir en un tercio los costes de desarrollo y reducir en un 20% el coste asociado a residuos.

La contribución de la realidad virtual a los procesos de creación de vehículos sigue evolucionando día a día y, lo mejor, superando paulatinamente las expectativas de los expertos, como demuestran los resultados del equipo de simulación de JLR que, desde hace cinco años, combina el software de diseño (CAD) más avanzado con herramientas de análisis (CAE), de ingeniería de sistemas (CASE) y de simulación (VME) para crear nuevos modelos.

El centro neurálgico de simulación virtual de JLR está en la herramienta denominada «The Cave», creada por la propia compañía: una habitación en la que tres de sus paredes y el techo se convierten en pantallas para proyecciones simultáneas 3D de los vehículos —o sus piezas— generados por ordenador; es la herramienta responsable de que, actualmente, los procesos de desarrollo de Jaguar y Land Rover sean un 40% más eficientes que hace diez años.

Sólo en los últimos 24 meses, las unidades de diseño e ingeniería le han ahorrado a la compañía —gracias al «The Cave»—más del triple de los costes tradicionalmente ligados al desarrollo de los vehículos.

Las imágenes 3D en alta resolución capacitan tanto a los técnicos para trabajar en el interior y exterior de los vehículos, que no resulta extraño observar, cual si de una escena de Minority Report se tratase, que el técnico, pertrechado con gafas 3D, dirige en «The Cave» un mando a distancia de última generación hacia la pantalla gigante que tiene frente a sí para guiar un «tour» virtual que muestra todos los secretos de uno de los modelos estrella de la marca: el Range Rover Evoque.

En suma, que cuando se desplaza el dispositivo hacia la izquierda, el vehículo gira sobre un eje invisible, mostrando cada milímetro de su carrocería. Un movimiento hacia delante, nos transportará al maletero. Un nuevo giro… y estaremos accionando el cambio de marchas.

Sólo un último dato. Hasta la fecha, el fabricante necesitaba construir una media de 250 prototipos en el proceso de diseño de un nuevo modelo. Gracias a la realidad virtual, la cifra se reduce casi a la mitad, es decir, entre 130 y 140 prototipos.

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