Mercedes Clase E. Puente… entre dos mundos

JAVIER FERNÁNDEZ

Un clásico… tres volúmenes. Manteniendo la habitual arquitectura de tres cuerpos, el actualizado Clase E añade hace gala de un corto voladizo delantero, un largo capó y, como novedad, un habitáculo más retrasado; un diseño de «cabina hacia atrás» que Mercedes redondea con un equilibrado voladizo zaguero.

En forma de panel, su apreciable superficie negra conecta la parrilla del radiador con los faros; parrilla que, dependiendo de los acabados, puede ser clásica o tridimensional, a la vez que se incorporan como equipamiento de serie los faros ‘LED Hgh Performance’ y, opcionalmente, la iluminación ‘Digital Light’. Todas las variantes de faros ofrecen un distintivo diseño nocturno y diurno, en forma de ‘ceja’ típica de la marca éste último.

La arquitectura de «cabina hacia atrás», también se aprecia en la vista lateral del coche, además de los opcionales tiradores enrasados en las puertas, habitualmente utilizados por Mercedes en sus modelos de gama alta.

En la zaga, destacan las luces LED divididas en dos partes, con un innovador contorno y un diseño especial: la óptica de estrella, en ambas partes de la luminaria, ofrece una ‘firma’ singular para el día y la noche.

Cuadro de instrumentos… experiencia digital. Marcada por la iluminación ambiental, la zona delantera del cuadro de instrumentos se extiende en un gran arco desde el parabrisas, que pasa por los pilares ‘A’ hasta las puertas, lo que acaba por crear una generosa sensación de espacio en el habitáculo; como la ‘isla’ de control flotante en la parte superior del panelado de puertas, a juego con el aspecto de las superficies acristaladas de las pantallas.

Diseñada como un cuerpo homogéneo, la consola central se une en línea recta a la sección inferior del cuadro de instrumentos; mientras, en la parte delantera, se integra un compartimento portaobjetos con tapa y portavasos de forma tridimensional; incluso en la parte trasera de la consola hay un reposabrazos acolchado. En términos de amplitud, la Clase E es una de las propuestas más generosa en el segmento de militancia, como también lo son sus 540 litros de capacidad de maletero.

En el capítulo motorístico, la mitad de las versiones de la Clase E son híbridas enchufables de cuarta generación, con mecánicas de combustión de 4 y 6 cilindros; además, tanto el motor diésel como el de gasolina incorporan un generador de arranque integrado (ISG), de forma que son híbridos suaves que, merced a la nueva batería, aumenta la potencia del motor eléctrico de 15 a 17 kW, mientras el par alcanza 205 Nm.

Dirección… también en el eje trasero. Si la maniobrabilidad de la nueva Clase E se debe, en buena medida, a un preciso guiado de las ruedas delanteras, también nuevo diseño a base de eslabones del eje posterior tiene mucho que ver: ayuda a la maniobrabilidad, a la vez que se rebaja en 15 milímetros la altura libre al suelo del coche. El ángulo de orientación de las ruedas traseras se cifra en 4,5 grados, lo que se traduce en una reducción de hasta 90 centímetros en el radio de giro del automóvil.

También está opcionalmente disponible un paquete tecnológico en el que se incluyen aplicaciones como la suspensión neumática con amortiguadores de regulación continua y dirección en el eje trasero, un equipo que mantiene constante la altura libre al suelo del vehículo, independientemente de la carga realizando, cuando se precisen, cambios en este parámetro.

Rutinaria… comodidad. Automatización personalizada para el uso diario, de forma que los usuarios pueden utilizar plantillas predeterminadas (‘templates’) de rutinas estandarizadas, con la posibilidad añadida de crear sus propias rutinas; además, la opcional climatización automática ‘Thermotronic’ permite ajustar automáticamente las salidas de aireación delanteras y, mediante el ‘perfil de usuario’, también es posible ajustarlas individualmente para cada asiento; lógicamente, y como de costumbre, las rejillas pueden ajustarse manualmente.

Entre los numerosos sistemas de ayuda a la conducción, destaca —por lo que influye en la seguridad dinámica— la alerta de atención: si los ojos del conductor no se centran en la carretera durante varios segundos, el sistema advierte de la distracción acústica y visualmente; si el conductor no reacciona, se produce un segundo aviso —tono continuo—; si el conductor sigue sin responder a la advertencia, el sistema puede iniciar una parada de emergencia activa.

El paquete de conducción ‘Plus’ aporta otra interesante novedad en lo tocante al mantenimiento de carril: si el sistema ‘Active Steering Assist’ dejase de operar porque las líneas de delimitación del carril no sean claramente visibles, se lo indicará al conductor mediante una vibración en el volante.

También la profusión de airbag caracteriza el equipo de seguridad: frontal para el conductor —rodillas incluidas— y acompañante, de ventana (‘windowbags’) para reducir el riesgo de impactos laterales en la cabeza, así como la hipotética penetración de objetos exteriores; de forma que, si se produce una colisión lateral grave, al airbag de ventana se despliega a modo de cortina por delante de todas las ventanillas, incluso pueden desplegarse si el sistema reconoce un accidente por vuelco.