Asaja exige a la industria una subida de la leche para compensar los costes
El incremento del precio de la alimentación animal aboca al cierre a muchas explotaciones
Asaja en Castilla y León exigió ayer a la industria láctea una subida del precio de la leche con el fin de compensar el aumento de los costes de alimentación del ganado, incremento que el ganadero no puede repercutir en la venta del producto, que aboca al cierre de muchas explotaciones y pone en peligro el modelo de «explotación familiar» en la Comunidad.
La OPA que preside Donaciano Dujo explica que la escalada de precios de los cereales y las oleaginosas, materias primas que se emplean en la elaboración de los concentrados de la alimentación animal, está llevando a las explotaciones de vacuno de leche de Castilla y León a una situación económica muy comprometida, abocándolas a una descapitalización e incluso a un posible cierre.
Advierte de que las materias primas que se emplean en la fabricación de los piensos, tanto las que aportan energía como las que aportan proteína, están en niveles históricos de precios y no hay expectativa de que en un corto plazo retomen la normalidad, lo que está suponiendo una sangría económica para el sector ganadero en general y para el de la producción de leche en particular.
El problema de los 980 ganaderos de Castilla y León es, como así denuncia Asaja, que no tienen capacidad para negociar con las industrias, que a su vez están presionadas por la gran distribución, por lo que arrastran precios que ya eran poco remuneradores antes del comienzo de la subida de las materias primas de los piensos.
Esta situación se viene a sumar a la que ha denunciado Asaja reiteradamente, que es que desde el año 2016 las centrales lecheras pagan al ganadero español una media de 3-4 céntimos menos por litro de lo que les pagan a los ganaderos de países como Alemania o Francia.
La alimentación representa una media del 55 por ciento de los costes de producción del litro de leche.