Azucarera prevé pagar el próximo año por encima de los 42 € de Acor

La fábrica de Azucarera de La Bañeza comenzó a recibir antes de ayer las primeras toneladas de remolacha de la campaña 2019/2020, la cual está marcada por su pérdida de parte de la superficie cultivada en tierras leonesas —en favor de la Sociedad Cooperativa General Agropecuaria (Acor) que cuenta con 1.275 hectáreas contratadas en la provincia— a consecuencia de su cambio de modelo y por la incertidumbre del precio del azúcar.

No obstante, la directora del Área Agrícola de Azucarera, Salomé Santos, aseguró ayer a este periódico que la primera jornada de recepción de raíz en la fábrica empezó «estupendamente». Con unas 3.700 hectáreas de remolacha de la provincia leonesa contratadas para la factoría de La Bañeza —a mayores de 300 toneladas que llegarán de Navarra y otras 300 de Toro— la industria prevé un ritmo de molienda de 9.000 toneladas de remolacha al día; «por lo que a mediados de abril creemos que terminaremos la campaña», indicó Santos.

Tras el primer día de recepción, la directora del Área Agrícola de la compañía, aseveró que «tenemos unos datos preliminares que apuntan maneras con polarizaciones altas y descuentos bajos». Al respecto, señaló que los primeros datos de polarización de remolacha se sitúan en una media del 17,2% y, a su juicio, «significa que haber esperado a abrir en condiciones óptimas en estas fechas ha sido bueno para los agricultores y para nosotros porque la remolacha ha ganado en kilos y en contenido de azúcar».

Asimismo, Santos aseguró que los pasados temporales de diciembre no han afectado nada a la campaña remolachera y que desde el punto de vista del arranque «todo ha comenzado muy bien y eso se refleja en los descuentos que están por debajo del 11%»; aunque todavía esperan en las tierras unas 150.000 toneladas por arrancar.

En cuanto al precio al que se pagará la remolacha, cree que «si la fábrica de La Bañeza tiene datos de rendimiento tipo entre los que han tenido Mirando de Ebro y Toro —con 103 y 108 toneladas tipo de media respectivamente— estimamos que los agricultores puedan cobrar con nuestro modelo y el precio del azúcar de este año —actualmente a más de 400 euros por tonelada— entre 3.900 y 4.100 euros por hectárea».

Por ello, Santos quiso enviar un mensaje de «tranquilidad y optimismo» a los agricultores porque afirmó que «Azucarera está para quedarse, apuesta por sus tres fábricas y está convencida de que los agricultores en La Bañeza van a ver dinero como ya lo han visto en Toro»; a la par que apuntó que el objetivo de la industria es recuperar a medio y largo plaza la superficie que ha perdido esta campaña. De hecho, estima que «previsiblemente el próximo año con los mismo rendimientos de esta campaña y con el precio del azúcar que creemos que será mayor de los 500 euros por tonelada, el ingreso medio del agricultor con el modelo de Azucarera estará por encima de los 4.200 euros por hectárea y de los 42 euros por tonelada que está ofreciendo Acor». 

Bajo esa premisa y en relación al acuerdo firmado entre las organizaciones agrarias y la citada Acor —que garantiza 42 euros por tonelada de remolacha hasta 2027—, Santos destacó que «el agricultor tiene la posibilidad de elegir entre un precio muy estable si las ayudas se mantienen o un precio que pueda resultar más atractivo que el de Acor en los años en los que el precio del azúcar está al alza; por lo que pienso que con nuestro modelo el agricultor va a cobrar más».

Pese a estar inmersos en un arbitraje por el precio que paga la industria la remolacha, Santos confirmó que ya ha trasladado a las organizaciones agrarias la propuesta de Azucarera para negociar un nuevo Acuerdo Marco Interprofesional (AMI) hace tres semanas «sin recibir ninguna respuesta». «Si es verdad que tienen voluntad de negociar y sentarse, espero que nos manden sus comentarios del borrador que les enviamos», concluyó.