Boñar cree que las instalaciones son un referente para la raza parda

Los alcaldes y representantes de los ayuntamientos de Boñar, La Ercina, Reyero, Vegaquemada y Valdepiélago mantuvieron ayer una reunión en el ayuntamiento de Boñar para exigir a la Junta que no se cierre la unidad veterinaria de Boñar. No se presentaron los alcaldes de Puebla de Lillo, La Vecilla y Valdelugueros.

El alcalde de Boñar, Roberto Álvarez, criticó que tres ayuntamientos del PP no hayan asistido a esta reunión cuando habían confirmado su asistencia y más «teniendo en cuenta que los ayuntamientos de Puebla de Lillo y Valdelugueros son los más afectados si se suprime la unidad veterinaria de Boñar». Álvarez señaló que recibió una llamada de uno de los regidores populares que le indicaba que desconvocara la reunión ya que todo estaba resuelto.

Perjudicados

Insistió en que el posible cierre de la unidad veterinaria causaría una gran pérdida económica y de tiempo a los ganaderos de la comarca. La zona se sentira muy perjudicada «al no existir este servicio tan próximo».

El regidor recordó que esta unidad es «referente a nivel mundial en cuanto a su calidad y saneamiento de la raza parda que una de las más grandes de la provincia en cuanto a cabezas de ganado que atiende. Además lo está haciendo con menos personal que otras unidades veterinarias». Además señaló que en caso de que se elimine esta unidad veterinaria «los ganaderos harías protestas y entiendo que harían bien luchar por un servicio que se les presta bien desde Boñar». El centro de Boñar cuenta con cinco funcionariao y las instalaciones son municipales y están cedidas a la Junta de Castilla y León para este único fin.

No obstante, Álvarez se muestra optimista de que esta unidad se mantenga en Boñar, si bien está a la espera de una confirmación oficial. «Hasta el momento nadie se ha puesto en contacto conmigo. Lo único que sabemos a través de un alcalde del PP que no ha asistido a esta reunión es que este unidad veterinaria se va a mantener».