Diario de León

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CHD retoma el plan para dar continuidad al Canal de Carrizo bajo el río Omaña

El proyecto formaba parte de la reparación integral de la infraestructura planteada en 2014 que no llegó a ejecutarse

La reparación integral de la infraestructura planteada en 2014 no llegó a ejecutarse, tal como muestra esta imagen de archivo. JESÚS F. SALVADORES

La reparación integral de la infraestructura planteada en 2014 no llegó a ejecutarse, tal como muestra esta imagen de archivo. JESÚS F. SALVADORES

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La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha retomado el proyecto para dar continuidad al Canal de Carrizo en la zona del cruce bajo el río Omaña, una intervención que se realizará mediante la construcción de un sifón cruzando bajo el cauce del río , que conecte directamente el canal trasvase del río Luna con la toma del canal. Esta es la propuesta de actuación que el organismo regulador de la cuenca está tramitando y que se encuentra actualmente en consulta pública a través del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) desde el pasado 21 de abril y cuyo objetivo principal es «corregir las afecciones que se producen anualmente en el río como consecuencia de la instalación y posterior retirada de un azud para derivar los caudales necesarios para dar continuidad al canal», según reza el proyecto.

El canal, con una longitud de 16,7 kilómetros, fue construido íntegramente por el Estado, desde los años 50 hasta su finalización en 1970, según reza el proyecto, que incide en que el plan de puesta en riego contemplaba que se abasteciera con la regulación del río Omaña a través de la construcción de su presa.

Mientras tanto, se construyó con carácter provisional un azud en el cauce del río Luna, a la altura de Mataluenga , y un canal para trasvase de agua desde el río Luna, alimentado por el embalse de Los Barrios de Luna, al río Omaña, a la altura de la toma del canal de Carrizo.

Un azud retirable cada año

La memoria recoge que desde entonces, cada año, para cada campaña de riego, ha sido preciso ejecutar y retirar un ‘puerto’ , como un azud provisional, en el cauce del río Omaña, para posibilitar la entrega del agua trasvasada a la toma del canal de Carrizo ya que el agua del Omaña, en este lugar es prácticamente nula en periodo de estiaje. Para ello, se utilizan gravas del propio lecho del río, sujetadas mediante escollera, que cruza transversalmente la totalidad del cauce con lo que se consigue un azud permeable, suficiente para derivar el agua hacia la toma del canal y mantener un cierto caudal fluyente en el río, aguas abajo, para lo que se deriva agua del río Luna. Esta intervención periódica supone «un obstáculo a la libertad de la movilidad de la fauna acuática » en un río que está considerado como LIC, de ahí la necesidad de acometer la obra.

Licitación en 2014
La intervención llegó a estar licitada hace ocho años con un presupuesto de 570.000 euros

De hecho, este actuación formaba parte del proyecto de reparación integral del Canal de Carrizo —era la primera fase—que se aprobó en 2014 con una inversión de 7 millones de euros. Esta primera fase fue adjudicada pero por motivos medioambientales se aplazó hasta la realización de un estudio geotécnico ya que el planteamiento inicial de la intervención era insuficiente para solucionar el problema, según la empresa adjudicataria.

La intervención, que se realizará en los meses estivales por ser en el río lleva menor caudal, se ubicará en el entorno de Santiago el Molinillo . Esos meses están dentro de la temporada de riego, por lo que es necesario mantener el caudal en el canal de Carrizo durante la ejecución de las obras del sifón. Por este motivo, se hace imprescindible establecer una derivación provisional del canal de trasvase hacia el río, previa al extremo sur del trasvase, y una toma provisional desde el río hacia el canal de Carrizo en un punto situado al sur del extremo de este canal. Este condicionante, hace necesario ejecutar esta fase antes del 1 de abril del año en que se ejecuten las obras.

La obra inicial llegó a estar licitada por un importe de 570.000 euros y, de hecho, tuvo el visto bueno de la Dirección General de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de la Junta de Castilla y León, que estimó que no era necesario someter la obra a evaluación de impacto ambiental, siempre que se asumieran durante su ejecución una serie de precauciones.

La solución planteada en el proyecto consistía en la ejecución de un sifón que cruce soterrado el cauce del río Omaña, conectando directamente el final del canal de trasvase desde el río Luna con el inicio del canal de Carrizo, con la misma capacidad que la toma en el río Luna, es decir, 2,40 metros cúbicos por segundo.

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