«Era el principal sustento de las familias jóvenes»

El primer teniente de alcalde de Alija del Infantado, Manuel Carro, mostró ayer su preocupación «por la problemática que se nos viene encima», tras la destrucción de la fábrica-incubadora del grupo empresarial Oblanca, la mayor empresa del municipio y motor de empleo de la localidad. El concejal puso de manifiesto que la planta era el principal sustento económico del municipio, y especialmente de las familias jóvenes, por detrás de la agricultura. «Así hemos mantenido abierta la escuela», dijo. Carro lamentó el perjuicio que supone el incendio aunque también valoró positivamente el mensaje trasladado por el gerente a la plantilla de que la fábrica tratará de levantarse lo antes posible para recuperar la producción y el empleo.