Diario de León

pajares de los oteros

La iglesia recupera su esplendor

El Ayuntamiento invierte 70.000 euros en arreglar la espadaña, las humedades, el tejado y las ventanas del templo, que data de la segunda mitad del siglo XVIII.

Uno de los técnicos y el alcalde repasan el proyecto con la iglesia a sus espaldas.

Uno de los técnicos y el alcalde repasan el proyecto con la iglesia a sus espaldas.

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armando medina | pajares
León

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El Ayuntamiento de Pajares de los Oteros invierte 70.000 euros en el arreglo de la iglesia que afectará a la mejora de la espadaña de la torre, las humedades en las paredes, el tejado y la sustitución de las ventanas. La obra, que se está ejecutando estos días, está incluida en los planes provinciales de la Diputación, por lo que la institución provincial subvenciona el 80% del coste.

«Se trata de una de las obras más demandas por los vecinos. Sobre todo lo que se refiere a la estructura de la torre y a las humedades. Agradezco la colaboración de la Diputación», señaló el alcalde, Julio César Fernández.

La iglesia, dedicada a san Vicente, fue construida en el año 1760 y está ubicada en la plaza del pueblo. Los muros son de tapial con zócalo de piedra. Destaca su espadaña de ladrillo. El tejado es de estructura de madera cubierto de teja. Está formada por un cuerpo principal, una capilla privada tras el altar, una antigua sacristía y un cuerpo anexo al coro.

La intervención tiene como objetivo conservar la iglesia en un buen estado para su uso, evitar humedades en la medida de lo posible y consolidar la estabilidad de los muros y la espadaña.

En concreto, en la torre se retirarán los materiales y ladrillos sueltos y restos de vegetación. Se limpiarán y se sustituirán por otros lo más similares posible. También se consolidará el apoyo de las campanas.

Se retejará toda la nave central y se sustituirá toda la cubierta de la antigua sacristía para que pueda ser utilizada ya que en la actualidad prácticamente no era posible.

La humedad, al suelo

Para evitar las humedades de las fachadas y muros, especialmente existentes en el zócalo, se ha utilizado un moderno sistema de electro-ósmosis pulsante que permite que las paredes se vayan secando lentamente «mandando» la humedad al subsuelo.

Finalmente se sustituirán las viejas ventanas de hierro.

«La iglesia no deja ser un elemento socializador en estos municipios pequeños. Y todo lo que sirva a la unión de los vecinos, contará con nuestro apoyo», afirmó Fernández, que agradeció la colaboración del párroco.

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