La Junta, las eléctricas y los ecologistas acercan posturas para desbloquear Villameca

La sede del Ente Regional de la Energía (Eren), ubicada en León, acogió el pasado jueves una reunión convocada por la Dirección General de Energía y Minas que tenía como único punto del día el análisis de la situación medioambiental del proyecto eólico denominado nudo de Villameca. Al encuentro acudieron el director general, acompañado de tres jefes territoriales relacionados con el proyecto, representantes de Endesa y Naturgy y personal de la Sociedad Española de Ornitología (SEO BirdLife).

Según confirmaron fuentes de la Consejería de Economía y Hacienda, se trata de una primera toma de contacto para buscar la manera de desbloquear este importante proyecto eólico paralizado por varias sentencias judiciales por su afección al medio ambiente. «El deseo de la administración es el de acercar posturas con las partes implicadas para poner en marcha estos parques con todas las garantías de que no se perjudica de ninguna manera al entorno natural», explican estas mismas, que avanzaron que habrá un nuevo encuentro, dentro de 15 días, para concretar el acuerdo.

Dentro del nudo eólico de Villameca se planteaba la construcción de 22 parques eólicos y más de 75 kilómetros de tendidos de alta tensión. Once de esos parques fueron anulados tras ser recurridas sus autorizaciones, en su mayor parte por SEO/BirdLife (Murias II, Curueña I y II, Villabandin I y II, Salce, Espina, San Feliz, Valdesamario, Peña del Gato y Quintana), y otros ocho parques previstos no llegaron a ser autorizados (Ampliaciones de Espina, Valdesamario y San Feliz, Murias I y III, Cirujales, Barrio de la Puente y Posada de Omaña). Las empresas adjudicatarias renunciaron a los proyectos que aún no habían sido construidos, aunque otros cuya autorización está anulada siguen aún en activo.

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en un auto del 13 de julio de 2018, ratificó la invalidez de procedimiento de autorización del parque eólico de Peña del Gato y, por extensión, de todo el complejo eólico del nudo Villameca, que afecta a las comarcas leonesas de Omaña, Cepeda y Bierzo.

Tras más de diez años de proceso judicial, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) dio la razón a SEO/BirdLife que desde el principio alegó las deficiencias de todo el procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental de los parque eólicos proyectados y ya construidos en la comarca de Omaña-Cepeda-Bierzo, en una importante zona para el urogallo cantábrico, catalogado como en peligro de extinción y recientemente declarada como especie en situación crítica por el Ministerio y la propia Junta de Castilla y León.

UNA CLARA FRAGMENTACIÓN

SEO/BirdLife mantuvo desde el principio que ha habido una «clara fragmentación de proyectos», tanto de los parques eólicos como de la subestación y tendidos necesarios para la evacuación de la energía, que en conjunto han supuesto la pérdida de «una importante superficie de hábitat disponible para esta especie amenazada». Si bien no todos los parques planteaban un mismo nivel de impacto potencial, la evaluación debía hacerse en conjunto como así establecen las distintas normativas aplicables y puesto que formaban parte de un mismo entramado cuyos efectos eran acumulativos y sinérgicos.

Aún así, los parques se fueron autorizando y construyendo, derivando en un impacto ya realizado, por lo que el auto confirmó que no podía aceptarse que se procediera a retrotraer el procedimiento y modificar las Declaraciones de Impacto Ambiental para intentar validar unos proyectos que no fueron evaluados adecuadamente.

El Tribunal Supremo ordenó el pasado mayo de 2019 la paralización total del funcionamiento de la línea eléctrica de la que evacúan los seis parques eólicos construidos, por lo que la Junta de Castilla y León se vio obligada a dictar dos órdenes de ejecución de las sentencias del TSJ.