León afronta la campaña de incendios con el reto de rebajar las 1.000 ha quemadas en 2020

Con una segunda mitad de junio bastante húmeda, León se enfrenta en condiciones favorables a la época de alto riesgo de incendios que empieza el próximo 1 de julio y cuyo operativo presentó ayer en el Centro del Fuego el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones. El reto es rebajar las algo más de 1.000 hectáreas que se quemaron durante 2020 aunque en los primeros cinco meses ya han ardido 662, según los datos facilitados por la consejería. El territorio afectado ha sido en su inmensa mayoría forestal, aunque sólo han sido 80 las hectáreas de arbolado que han sido arrasadas por el fuego hasta el 31 de mayo.

El consejero destacó ayer que las registradas hasta ahora en toda la Comunidad —419 incendios con 1.421 hectáreas forestales quemadas— son unas «cifras razonables» aunque las condiciones meteorológicas no han sido muy favorables, con varios periodos más secos y con menos precipitaciones que la media de los últimos diez años. La Comunidad se encuentra actualmente en periodo de riesgo medio, decretado el pasado 11 de junio, con el que llegará a la época de alto riesgo que comienza el jueves y que persistirá durante todo el verano.

Para esta época se han habilitado un operativo, «cada vez más potente», según el consejero, que permite que Castilla y León tenga una de las respuestas contra los incendios forestales «más eficaces de España». Todo ello «gracias al compromiso» de los hombres y mujeres que integran las cuadrillas y el resto del personal que integran los más de 4.500 efectivos. El consejero destacó que este año se ha reforzado este capítulo con la incorporación de 18 nuevos agentes medioambientales y siete ingenieros interinos, así como 30 técnicos de apoyo y la realización de prácticas combinadas.

Entre las novedades, figuran la mejora de la cobertura anual del personal fijo discontinuo y la incorporación de un piloto de refuerzo para minimizar las paradas técnicas del helicóptero de coordinación.

Suárez-Quiñones enumeró también las mejoras tecnológicas que facilitarán las comunicaciones y la geolocalización de los incendios. En este punto, el consejero destacó el control operacional de las aeronaves; mejoras en la captación y transmisión de imágenes y vídeo; se dota al PMA de estación meteorológica que envía directamente los datos a la plataforma de territorio inteligente Jcyl; la adquisición de equipos de radio y 4 repetidores móviles más para dar mejor cobertura de comunicaciones en los incendios.

El consejero, que presentó el operativo acompañado por delegados y secretarios territoriales de las nueve provincias, destacó que se trata de un «operativo de carácter autonómico, para atender a todo el territorio, donde se le necesite» con medios que están distribuidos «estratégicamente», según las características propias de la Comunidad, «para actuar en todas las provincias», y poder «desplazarse fácilmente de unos lugares a otros cuando las circunstancias lo requieren, mediante los protocolos establecidos al efecto, y colaborando con las comunidades autónomas limítrofes y con Portugal, además de con Ayuntamientos, Diputaciones en incendios no forestales».