Diario de León

Campo

La montaña leonesa pierde en siete años un 60% de sus pastos por los ajustes de la PAC

La reducción del Coeficiente de Admisibilidad de Pastos puede provocar el recorte de las ayudas a los ganaderos

La falta de pastos puede provocar además problemas de alimentación a la cabaña ganadera. ARAUJO

La falta de pastos puede provocar además problemas de alimentación a la cabaña ganadera. ARAUJO

Villablino

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La reducción del Coeficiente de Admisibilidad de Pastos (CAP) hace perder a la montaña leonesa casi un 60 por ciento de superficie de pastos desde el año 2015, algo que según el presidente de UCCL en León, Juan Antonio Rodríguez , «es una vergüenza, ya que se están cargando a la montaña». El responsable de esta organización agraria recuerda que la admisibilidad de pastos se cifra en «poco más del 30 por ciento».

Esta situación no es nueva. Según Rodríguez, se remonta al 2015, cuando los pastos servían para justificar cualquier derecho dentro del sector, lo que beneficiaba a los ganaderos. «Tenían derechos y compraban pastos para justificarlos», aclara.

Por su parte, desde las administraciones comenzaron a delimitar y a marcar unas pautas, entre las que se encuentra la reducción del coeficiente de admisibilidad. «Los ganaderos no tienen culpa de esto pero lo pagan ellos», destacó.

Reclamaciones

Los ganaderos afectados podrán presentar sus alegaciones hasta el próximo 30 de este mes

En este sentido, Rodríguez explicó que como ocurre en este momento la Junta leva a cabo las mediciones de las hectáreas de pastos mediante un satélite, el cual que solo determina colores e imágenes, y que no a acompañado por nadie de forma física» y por lo tanto «no se ajusta a la realidad de la zona». Una vez recogidos los datos, la administración autonómica los pasa al Sistema de Información Geográfica de Parcelas Agrícolas , (SIGPAC).

Unas reducciones que afectan a la totalidad de los ganaderos de la provincia leonesa desde Villablino hasta la montaña de Riaño . Rodríguez reconoce que aunque que cada uno dentro de sus características y sus circunstancias, hay ganaderos que tiene un total de 600 hectáreas, de las cuales 200 están designadas con derechos de pastos y para poder continuar con esos 200 derechos tienen que llegar a las 749 hectáreas, lo que supone un 25 por ciento más. También se encuentra casos en los que se reducen hectáreas en una zona donde la propia Junta le había permitido hacer un desbroce meses antes, y el ganadero realiza el citado desbroce. «Son situaciones que se escapan de la lógica, matizó, a la vez que recordó que en el año 2015, la provincia de Salamanca aumenta el coeficiente de admisibilidad de pastos un 10 por ciento, mientras que en León hay una reducción significativa.

Una problemática que preocupa a los ganaderos , no sólo de cara a las ayudas de Política Agraria Común (PAC) sino también a la hora de cumplir con los contratos firmados con la Junta de Castilla y León, ya que en caso de que el ganadero incumpla alguna de las cláusulas del contrato, entre las que se encuentra tener las mismas hectáreas de superficie admisible desde la firma del contrato hasta su finalización, el ganadero se vería obligado a tener que devolver las ayudas que conllevan la firma de ese contrato. Y mientras tanto se espera por el nombramiento del nuevo Director General de Política Agraria Comunitaria, aunque todavía no hay fecha para su designación. «Es la persona que debe resolver este tipo de situaciones», matizó.

Ademas, esta situación es especialmente delicada para aquellos ganaderos que hayan perdido más del diez por ciento de superficie total admisible de pastos, por lo que desde el sindicato ya han realizado varias reclamaciones de ganaderos. «Hasta el día 30 de mayo se pueden presentar modificaciones a la PAC», asegura Rodriguez, a la vez que explicó que «es increíble que los ganaderos tengan que estar más pendientes de los trámites administrativos y de los contratos que de cuidar de sus animales», sentenció.

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