La nieve complica la conexión con Asturias y con seis puertos

La montaña leonesa amaneció ayer con una densa capa de nieve que en algunos punto dejó espesores de más de treinta centímetros. Durante toda la mañana continuó nevando lo que ocasionó numeroso problemas de circulación en varias carreteras de la provincia. La circulación en la autopista de peaje A-66 entre Canales-La Magdalena (León) y El Moclín (Asturias), se vio condiciona a primera hora por la nieve un tramo de una veintena de kilómetros.

Además, era necesario usar cadenas en seis puertos leoneses. En concreto por Pando (LE-234), en la localidad de Prioro; Fonte da Cova (LE-126), en La Baña; Monteviejo (LE-233), en Besande; Tarna (CL-635), en Burón; Las Señales (LE-333), en Puebla de Lillo; y en el puerto de Piedrafita Pontedo (LE-315), en Matallana de Torío.  

Sin cadenas, pero con bastante dificultad, se circulaba por la LE-723, en dos kilómetros a su paso por Vega de Espinareda; la LE-495, entre los kilómetros cinco y diez, en Cabrillanes; la LE-493, entre el kilómetro 39 y 44, en Riello; la LE-331, en 14 kilómetros a la altura de Puebla de Lillo; la LE-215, entre los puntos kilométricos seis y 18, en Besande; la N621, en 30 kilómetros cerca de Boca de Huérgano; y la N-625, en otros tantos, en Oseja de Sajambre.  

Según la Agencia Estatal de Meteorolía, para hoy lunes se prevén cielos nubosos con precipitaciones débiles que empezarán de madrugada, desplazándose durante el día hacia el este. En el extremo norte serán localmente más intensas y persistentes. La cota de nieve por encima de 1.800 ó 2.000 metros, bajando hasta los 1.200 al final, cuando apenas queda precipitación. Las temperaturas mínimas sin grandes cambios, y las máximas en ascenso. Habrá heladas débiles en las montañas y vientos del noroeste, flojos en general, aunque con intervalos de fuertes en cumbres de la cordillera Cantábrica.