Los proyectos ecoturísticos toman impulso tras el 'carpetazo' legal a San Glorio

Después de que el Tribunal Constitucional -tras un recurso promovido por WWF España, SEO/BirdLife, Gedemol y la Fundación Oso Pardo (FOP)- anulara definitivamente la Ley que posibilitaba la construcción de la estación de esquí de San Glorio, los grupos ecologistas que lideraron la oposición a la construcción de esa macroestación invernal reivindican con más fuerza que nunca el impulso de esta zona a través de proyectos de ecoturismo.

Conscientes de la sangría poblacional tanto de la montaña oriental leonesa como de la palentina, precisamente por la falta de recursos económicos, los grupos conservacionistas se unen una vez más para poner sobre la mesa una propuesta lanzada ya en 2010, que consiste en la construcción de un centro de interpretación y actividades en torno a los cinco grandes ungulados y sus depredadores presentes en el territorio, un spa-centro termolúdico, y la adecuación de un humedal. Aunque estas propuestas, que hablaban de la creación de hasta 400 empleos entre directos e inducidos, fueron en su día muy bien recibidas, no hubo voluntad para impulsarlas.

WWF España, SEO/BirdLife, Gedemol y la Fundación Oso Pardo (FOP) consideran que «la Montaña Oriental Leonesa y la Montaña Palentina necesitan un impulso decidido social y económico para superar la difícil situación que están atravesando, con una pérdida continua de población y de servicios, y pueden hacerlo aprovechando su principal recurso: una naturaleza privilegiada». Los ecologistas explican que por esta razón se crearon el Parque Regional de Picos de Europa y el Parque Natural de Fuentes Carrrionas y Fuente Cobre–Montaña Palentina, para proteger la rica biodiversidad de estos territorios y para ser motores del desarrollo socioeconómico de los municipios incluidos. «Por la misma razón toda el área se incluyó dentro de la Red Natura 2000, creada para asegurar la conservación del patrimonio natural europeo», añaden.

El hecho es que estas montañas son las únicas en toda la Península Ibérica, ya que albergan los cinco ungulados autóctonos (ciervo, jabalí, corzo, rebeco y cabra montés) y los dos grandes carnívoros terrestres ibéricos, el oso y el lobo, y esto es un importante hecho diferenciador que bien divulgado, según aseguran los ecologista, «podría hacer de este territorio destino preferente para los amantes de una naturaleza plena y bien conservada. Lo que en definitiva se busca con esta propuesta es un turismo de naturaleza sostenible y bien regulado en torno a los dos parques, el Regional de Picos de Europa, y el Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre, y a estas y otras especies, además de otras actividades vinculadas al ocio en la naturaleza como por ejemplo un uso razonable de la nieve mediante esquí de fondo, o travesías con esquíes o raquetas, pueden rentabilizar los servicios de alojamiento y restauración que ya existen en estas comarcas. Por eso reclaman un fuerte impulso por parte de la administración autonómica, especialmente el Parque Regional de Picos de Europa, que según los grupos impulsores del proyecto, «hasta la fecha ha funcionado más como una reserva de caza que como un Espacio Natural Protegido».

Los ecologistas ponen como ejemplo experiencias, algunas de ellas en la propia Cordillera Cantábrica, en las que la inclusión de un territorio en la Red de Espacios Naturales Protegidos ha supuesto mejorar las condiciones sociales y económicas de su población, como el Parque Natural de Somiedo, en Asturias. «Animamos a la Junta de Castilla y León a que abandone definitivamente iniciativas como la de la macroestación de esquí de San Glorio, a todas luces insostenible y que ha generado falsas ilusiones y frustración entre la población local, y apueste por los parques naturales, destaca la FOP desde su página web.