Diario de León

Los mineros celebran Santa Bárbara | Lámpara minera y diploma

Testigo de la realidad minera

Caboalles de Arriba homenajea a Antonio Terrón, ex trabajador de la MSP, a la que dedicó 44 años de una vida marcada por la tragedia del pozo María

Antonio Terrón es el homenajeado de este año. DL

Antonio Terrón es el homenajeado de este año. DL

Villablino

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La Junta Vecinal de Caboalles de Arriba le hará llegar una lampara minera y un diploma a uno de los mineros más antiguos de la citada pedanía, Antonio Terrón, para festejar el día de Santa Bárbara. A pesar de que la crisis sanitaria ha marcado este día y los actos con caracter presencial han decidido anularse, la Junta Vecinal no ha querido olvidarse de uno de los mineros más antiguos del pueblo, al igual que años anteriores.

Este hombre nació en la localidad asturiana de Cerredo en 1935, lugar de donde era su madre, sin embargo «a los dos meses pasé la Collada en caballo y a partir de entonces siempre viví en Caboalles de Arriba, donde di los primeros pasos», explica Antonio Terrón. A los diez años de edad, fue a estudiar al colegio Los Agustinos de León para estudiar el bachiller y como detalle, narra que «dos compañeros llegaron a ministros: Rodolfo Martín Villa y Manuel Núñez Pérez», matiza.

A pesar de los estudios, las circunstancias de la vida hicieron que se tuviera que poner a trabajar y en el año 1953 comenzó en las oficinas de la empresa Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP), en la que estuvo durante 44 años. «Viví el momento más trágico de la minería de Laciana, el accidente del Pozo María», recordó, a la vez que ve como el sector minero ha ido en declive. «Se ha diluido como un azucarillo, sin ser capaces de generar otra fuente de trabajo para nuestros jóvenes», mientras que lamenta no poder evitar que la juventud se vea en la necesidad de buscarse la vida en otro lugar con la consiguiente despoblación del valle.

Este vecino de Caboalles de Arriba se casó a la edad de 26 años con María Luisa Álvarez , de esa unión llegarón dos hijos y tres nietos «que son los que nos hacen tener una vejez llena de felicidad», destacó Terrón.

Mientras recuerda uno de los hechos del que se siente muy orgulloso, «haber sido concejal del Ayuntamiento de Villablino, aproximadamente durante doce años». En ese tiempo coincidió con con los alcaldes lacianiegos Manuel Barrero, Jesús Fernández y Pedro Fernández.

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