Una medalla para el ángel de la N-601

Salvó la vida de un conductor cuyo coche había comenzado a arder en Matallana de Valmadrigal tras accidentarse en la carretera N-601 y no podía abandonar el turismo. Aunque su intención fue la de permanecer en el anonimato, finalmente su valor y el de su familia, que le ayudó en el rescate, recibirá el reconocimiento de la sociedad, con la concesión de la Medalla de Plata al Mérito de la Protección Ciudadana de Castilla y León. No es para menos, pues como el héroe anónimo -verdadero ángel de la guarda de la N-601- reconoció en su momento, "le libramos de una muerte segura".

Jesús Cordero Herrero,regresaba con su familia a Palencia tras desplazarse a León para matricular a una hija en la Facultad de Veterinaria de León. Eran cerca de las cinco menos cuarto cuando del 18 de julio cuando, al llegar a la altura de Matallana de Valmadrigal, observó un turismo accidentado que había comenzado a arder. Decidió entonces intentar apagar el fuego con un extintor que llevaba en el fuego y a esta labor se disponía cuando su mujer le advirtió de la presencia del conductor del vehículo accidentado.

Cordero, que posee el título de socorrista, y sus familia unieron esfuerzos por sacar al herido, que no podía moverse, y evitarle una muerte espantosa. Si en la operación de rescate la familia empleó alrededor de un minuto, no mucho tiempo después las llamas habían calcinado completamente el turismo. El accidente se produjo al salirse el vehículo de la vía y colisionar con un petril situado en la cuneta. La violencia del golpe provocó heridas de carácter grave en el conductor y el incendio.

La misma distinción recibirán los agentes del Cuerpo Nacional de Policía Miguel ángel Sánchez Fernández, Javier Gallegos Álvarez y Francisco Sánchez González, que salvaron la vida a un hombre de 43 años que se había autolesionado.