Valdeón y Sajambre siguen esperando que Parques Nacionales fije las indemnizaciones
Nada se sabe sobre las negociaciones entre los propietarios de los terrenos cinegéticos de la vertiente leonesa de Picos de Europa y Parques Nacionales para fijar las indemnizaciones que deben recibir por la supresión de la caza en su territorio.
Desde que el pasado mes de diciembre entrara en vigor la nueva Ley de Parques Nacionales de 2014, después de una moratoria de seis años, la actividad cinegética quedó prohibida en toda la red de espacios nacionales sin que antes se fijaran las compensaciones a los propietarios de los derechos en los pueblos, la mayoría juntas vecinales.
«No sabemos nada, el ministerio todavía no ha contestado a la propuesta que ha enviado nuestro abogado», explicaba ayer mismo el alcalde de Oseja de Sajambre, Antonio Mendoza, que no quiso avanzar ningún detalle de esta propuesta.
El pasado 4 de diciembre se celebró la última cacería autorizada en Picos de Europa, una batida precisamente de jabalí, por la que Sajambre ingresó tres mil euros por parte de los cazadores participantes en la jornada, unos ingresos que con la prohibición de la caza se han dejado de percibir, ya que los controles poblacionales son realizados actualmente por la guardería del parque.
Por su parte, desde la Dirección General de Patrimonio Natural de la Consejería de Fomento de la Junta de Castilla y León ha realizado un informe para calcular la pérdida de ingresos por parte de los pueblos como consecuencia de la supresión de la caza, y así poder negociar con el Estado una compensación justa por el fin de esta actividad, que para muchas pedanías, así como para muchos establecimientos hosteleros de la zona, suponía su principal fuente de ingresos.
Un estudio encargado hace seis años apuntaba que Sajambre y Valdeón recibían cerca de dos mil cazadores al año que dejaban casi 900.000 euros en cuotas de caza y demás gastos.