Con zapatos rojos de León al mundo

De León salió hace años para empezar una nueva vida en otro lugar, lejos, pero siempre pensando en casa. Desde entonces ha vivido en Estados Unidos, Suecia o Francia y ese periplo que parece no acabar le llevó a ponerse un seudónimo: Dorothy Red Shoes. Como los zapatos rojos de Dorothy, la protagonista de la entrañable historia de Mago de Oz, Raquel Canseco no ha parado de seguir el camino de baldosas amarillas que le llevaba a algún lugar, pero siempre soñando con golpear sus brillantes zapatos rojos para poder volver a casa.

Ahora, Raquel Canseco se ha convertido en una ‘influencer’ con miles de seguidores en las redes sociales. Una persona que crea tendencia y que es capaz de influir en las decisiones de muchas otras. De hecho, más de 61.000 personas le siguen en Instagram, más de 17.000 en Facebook y más de 3.000 en Twitter.

Su vida transcurre entre Madrid y París, donde trabaja su marido —también leonés— aunque tras su reciente maternidad se encuentra en León, donde reconoce sentirse feliz. Aquí le gustaría venirse junto a su familia en un futuro no muy lejano. Mientras tanto, sigue dando ideas desde su blog sobre bodas, moda, maternidad y estilo de vida y protagonizando campañas de publicidad como la que acaba de lanzar junto a la marca de calzado Wonders.

BOSSANOVA WEDDINGS

A esta apasionada de las bodas siempre le gustó escribir, de ahí su blog. Desde pequeña tuvo claro que quería ser periodista o traductora. «El caso es que acabé estudiando Derecho y Administración de Empresas, pero siempre me quedó la espinita clavada», explica Raquel Canseco. Cuando terminó sus estudios buscó un trabajo que conjugase lo que había aprendido con su verdadera pasión. «Me hice copy publicitario después de hacer Márketing y Publicidad y acabé empleada en el departamento de cuentas y márketing». No era eso exactamente lo que ella buscaba, así que por las tardes empezó a escribir su blog ( www.dorothyredshoes.es ). «Era un pequeño cajón desastre en el que escribía de todo lo que me gustaba». Aquel año, su ahora marido le pidió matrimonio y una cosa llevó a la otra. Empezó a interesarse por el mundo de las bodas y a investigar tendencias y marcas en un momento en el que los blogs de este tipo no eran tan numerosos. «Me empezaron a llamar marcas y así empezó todo», apunta.

La maternidad y el buscar un poco de la escasa conciliación laboral hicieron el resto y decidió no volver al trabajo después de una excedencia. «Ahora tengo mucha flexibilidad, he conseguido tener mi pequeño medio de comunicación, que es mi blog, pero no puedes dormirte en los laureles porque cada día hay mucha gente nueva y nunca puedes conformarte», argumenta.

Bueno y malo

OLDER GARCÍA

«Lo mejor? Que trabajas en algo tuyo y que conoces a mucha gente que le encanta lo que hace y lo peor, que es un poco esclavo y siempre estás pegado al móvil». Y aprovecha para hacer una reflexión sobre los nuevos empresarios: «Lo malo de España es que existe la creencia de que el que emprende porque le ha ido mal en otra cosa», añade.

Sin embargo, no todo es tan bonito como parece en el mundo 2.0. «Se proyectan vidas perfectas a través de las redes sociales y se acaba creando un mundo irreal en el que ves cosas feas». Y es que las redes sociales son herramientas de doble filo. «No me gusta demasiado exponer mi vida personal porque nunca sabes quién está al otro lado»

Ahora mismo, Raquel Canseco está volviendo a la actividad después de haber sido madre hace unos meses y se encuentra inmersa en la elaboración de un libro.

Nunca se pone límites y asegura que se apunta «a un bombardeo». Colaboraciones en revistas de bodas, de maternidad, organización de talleres para novias, campañas de publicidad, embajadora de marcas o asesora para emprendedores. Esta Dorothy leonesa no tiene límites a la hora de hacer lo que más le gusta. Donde le lleven sus zapatos rojos.