El Banco de Alimentos salva la Navidad de 1.250 familias leonesas
Más demanda por la pobreza energética. La demanda de ayuda en el Banco de Alimentos creció 18%, en gran parte por la subida de la luz, y se teme que en 2022 se agudice la necesidad de productos básicos. Más de 1.250 familias reciben los lotes de la entidad.
Los lotes incluyen variedad de alimentos. MARCIANO PÉREZ
«Me ha mandado la trabajadora social porque, si no, no puedo pagar la luz». Cada vez son más las personas que llegan al Banco de Alimentos con esta justificación, apunta Juani Pérez, gerente de la entidad. La subida imparable del recibo de la luz es una de las causas del incremento de la demanda de ayuda alimentaria que ha experimentado el Banco de Alimentos de León desde enero a octubre de 2021, con un 18% más de usuarios, con respecto al mismo periodo de 2020. ‘Ahorrar’ en comida para poder pagar el recibo o endeudarse menos es una de las soluciones que han encontrado los servicios sociales ante el encarecimiento del suministro eléctrico. «Desgraciadamente, una economía de 400 euros se desequilibra enseguida e incluso hemos atendido a algunos autónomos», subraya.
El fin de la cobertura social de los Erte también ha empeorado la situación de las familias que llegan al Banco de Alimentos. Aunque no se han vuelto a producir situaciones similares a las vividas durante el confinamiento, cuando se recibieron más de 350 familias al mes, «estamos preocupados por lo que pueda pasar a partir de enero. La cuesta de enero ya es dura de por sí y lo que se avecina no es fácil», señala Juani Pérez.
Las donaciones recibidas han compensado la menor repercusión que ha tenido este año la Gran Recogida del Banco de Alimentos, que entrega más de 5.000 lotes al año. «Hay familias que vienen una vez y otras que vienen varias veces», explica.
Hay una «realidad paralela» que conocen bien de cerca las personas voluntarias que atienden el almacén del Banco de Alimentos. Las fiestas navideñas son uno de los momentos punta y, junto con septiembre, los que registran mayor afluencia por circunstancias diferentes.
Desde el 1 de diciembre, el almacén ubicado en el complejo de Mercaleón atiende a una media de 15 a 20 familias al día cuando normalmente son 10-12. Las semanas de Nochebuena y Nochevieja son las de mayor ajetreo. El Banco de Alimentos realiza los repartos cada cinco semanas y a las familias que no les toca en este periodo se les ha citado igualmente para que acudan a recoger los productos navideños que se han sumado a los lotes ordinarios.
Turrón, polvorones, calendarios de adviento, que han sido la alegría de los más pequeños de la casa en muchos hogares, se han incorporado a los lotes navideños. «La labor es siempre la misma, pero en Nochebuena atendemos todo lo que llegue aunque no haya cita previa», admite Juani Pérez. El Banco de Alimentos agradece la colaboración de las empresas y personas que a lo largo del año realizan las donaciones y participan en las campañas de recogida para surtir su almacén.