«Dos de cada tres migrantes son violadas a su paso por México»

Pasan por México a millares. El éxodo de migrantes centroamericanos de Honduras, El Salvador y Guatemala camino a Estados Unidos huyendo de la extrema pobreza son la cara visible de una crisis humanitaria que se encuentran en el país azteca con una de las sociedades más peligrosas del mundo. Un tránsito que no sale gratis, sobre todo a las mujeres. Los antropólogos mexicanos Aleida Quintana y Fernando Valadez estarán hoy en León gracias al programa de Defensores de los Derechos Humanos de Amnistía Internacional para impartir conferencias en varios institutos de la capital. Los dos activistas son integrantes de T’ek’ei Grupo Interdisciplinario por la Equidad, organización que da acompañamiento a familias de personas desaparecidas, víctimas de trata de personas y feminicidios en Querétaro.

La visita de los dos defensores de los derechos humanos coincide con la conmemoración del Día Internacional de las personas Migrantes. La organización fue fundada por Aleida Quintana en diciembre de 2012. 

«Desde nuestra organización hicimos acompañamiento a algunas inmigrantes que estuvieron desaparecidas en México. Dos de cada tres mujeres migrantes tienen que tomar pastillas anticonceptivas porque saben que durante su tránsito por México van a ser violadas sexualmente», denuncia Quintana. Las mujeres migrantes centroamericanas que se dirigen a Estados Unidos se exponen a los mismos riesgos que sufren las mujeres mexicanas en un país en el que pese a tener las leyes más avanzadas contra la violencia de género y la igualdad entre hombres y mujeres, los miembros del Gobierno incumplen. «Las mujeres son agredidas por los hombres servidores públicos o carteles de narcotráfico. México está abierto para la población migrante pero lo que nos encontramos en el día a día, desgraciadamente, es mucha discriminación hacia la población migrante centroamericana. Pero también hay muchos mexicanos y mexicanas que apoyan a la población migrante que pasa por México. Hay muchas organizaciones que dan acompañamiento a la población migrante, casas de acogida, pero trabajan con muy pocos recursos frente a una necesidad muy grande de migración que hay ahora en México».

Desde el año 2013, Aleida Quintana elabora una base de datos de personas desaparecidas y víctimas de trata con fines de explotación sexual, trabajo forzado, mendicidad, feminicidios, trabajo doméstico y matrimonio forzado, así como dar acompañamiento a familias de niñas, mujeres y hombres desaparecidos, investigando y rescatando a estas personas de las redes de la trata de personas, a la vez que documenta violaciones a los derechos humanos por parte de los funcionarios en el proceso de denuncia, investigación, búsqueda y localización de las personas, actividad a la que se sumó Fernando Valadez en 2014.

MÁS DESAPARICIONES

«La violación de los derechos humanos se han acrecentado en México en los últimos doce años. En los últimos años se han incrementado el número de personas desaparecidas en México. Se habla de más de 46.000 personas desaparecidas como cifra oficial, pero la cifra extraoficial que tenemos las organizaciones de la sociedad civil son más de 80.000 personas utilizadas por el crimen organizado. Algunas son localizadas sin vida bajo un Estado que nos ha dejado claro que no cuenta con mecanismos de identificación de personas. Muchas son enviadas a fosas comunes y eso acrecienta el dolor que padece el país, donde reina la impunidad».

La organización T’ek’ei Grupo Interdisciplinario no tiene constancia de que las mujeres desaparecidas en México tengan un destino internacional. «La mayoría de las mujeres son víctimas de mendicidad, trabajo doméstico forzado, trabajo forzado en bares, matrimonios forzados. En la ciudad de México en el año 2013 fueron localizadas a 430 mujeres víctimas de explotación sexual y entre ellas había 45 extranjeras de Rusia, Malasia, Rumanía, Colombia, Honduras, El Salvador o Venezuela, y el resto de mujeres eran mexicanas, es decir, que en México existe la trata de personas internacional, pero no llevamos ningún caso de mujeres que haya sido trasladada fuera del país».

LUCHA FEMINISTA

Organizaciones sociales y autoridades mexicanas acaban de poner en marcha mesas de trabajo con el nuevo gobierno de José Manuel López Obrador «que está abierto al proceso de Memoria Histórica, sobre todo dando voz a las víctimas que el gobierno anterior de Enrique Peña nunca hizo».

Aleida Quintana sostiene que únicamente un pacto global de los hombres contra la violencia machista permitirá acabar con esta lacra en el mundo. «En México hay leyes contra la violencia machista que no se cumplen, hay impunidad. La lucha feminista parece que no es suficiente por lo que necesitamos un pacto global de los hombres, que es un pacto con el mundo, y que el movimiento feminista abra sus puertas, que entienda que hay muchas maneras de vivir el feminismo y con esa certeza permanecer unidas pese a las diferencias».