Diario de León

La medida del declive de León

Una conjunción de factores cuyo germen surge en los años setenta, como la desregulación del mercado financiero y la contención salarial, está detrás de una nueva realidad que se abre paso también en León: la decadencia de la clase media y la aparición de los trabajadores pobres..

El profesor de Economía Aplicada de la Universidad de León, Luis Buendía. SECUNDINO PÉREZ

El profesor de Economía Aplicada de la Universidad de León, Luis Buendía. SECUNDINO PÉREZ

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

cristina fanjul | león

«Los salarios bajos son un lastre para el crecimiento porque con una renta de 600 euros al mes ¿qué consumes?» El profesor de Economía Aplicada de la Universidad de León, Luis Buendía, asegura que en los últimos quince años, el coeficiente que mide la desigualdad ha crecido en León, un dato que él califica de «preocupante». Explica que el coeficiente de Gini, al medir la desigualdad y, por tanto, la cantidad de gente que posee un determinado porcentaje de renta, resulta fundamental a la hora de hacer previsiones. «En España, el 50% de la población más pobre se reparte el 10% de la riqueza, con lo que el 50% más rica se queda con el 90% y, dentro de ellos, el 10% más rico se queda con el 55%», destaca. Luis Buendía explica que en el caso de León, el 58% de los salarios es de tan sólo 9.126 euros al año. «Cuanta más distancia hay entre la media y la mediana, hay más desigualdad, y cuanto mayor es la desigualdad más riesgo hay de acentuar el éxodo rural o a otras provincias que son capaces de ofrecer mejores expectativas», subraya. El profesor Buendía sostiene que en esta situación los jóvenes de León seguirán yéndose y se pregunta la perspectiva que les quedará a los mayores. «Hay una línea de razonamiento económico que dicta que el consumo de bienes básicos no dejará de hacerse», explica. Buendía García añade que, sin embargo, lo que se resiente es el consumo de bienes duraderos, como coches o electrodomésticos. «Estos son los que tienen un efecto arrastre en el empleo», precisa, y explica que el círculo vicioso hará que los empresarios dejen de contratar y harán ajustes de plantilla a la baja.

Luis Buendía manifiesta que desde 2007 el coeficiente de Gini ha aumentado de un 0,2 a un 0,323%. «En seis años, ha aumentado en España más de lo que lo ha hecho en Europa, y en León, la cifra se dispara hasta el 0,44. «Cuanta más desigualdad, la incidencia de enfermedades es mayor. Si la crisis en León no ha supuesto un drama ha sido gracias a los pensionistas, pero con las últimas reformas en las pensiones, las jubilaciones también perderán valor». Y es que, la inflación interanual ha sido del 3% desde el inicio del año. «La dislocación social, el drama de los próximos años, será brutal».

El peso del salario en el PIB

Luis Buendía recalca que una de las grandes ventajas que muchos españoles han tenido durante la recesión ha sido la de tener casa en propiedad, si bien explica que cada vez son más los trabajadores que no la tienen y que, a causa del bajo salario al que acceden, se ven obligados a vivir en la calle. «Se trata de un fenómeno que cada vez se da más en las grandes ciudades. Son los conocidos como working poor , un fenómeno que se ha comenzado a dar, de manera paradójica, durante la fase expansiva», manifiesta. Además, los salarios no han crecido al ritmo de otro tipo de rentas y desde mediados de los años noventa, la proporción de los salarios sobre el PIB ha bajado, y en el caso de la economía española, lo ha hecho en un momento en el que el empleo incluso crecía. «Desde la Segunda Guerra Mundial hasta los años setenta, el peso de los salarios en la renta nacional aumentó de manera notable. ¿Qué pasó? Que las empresas comenzaron a ser menos rentables y los empresarios se rebelaron», sostiene Luis Buendía. El economista precisa que fue entonces que comenzó la desregulación del mercado de trabajo y en el ámbito financiero. «Hasta entonces, se impedía que los bancos hicieran determinadas cosas que, desde entonces, fueron permitidas», afirma el profesor. En su opinión, con esa decisión, se estimuló que los flujos financieros dejaran de destinarse a inversión productiva. «En España, el timming fue distinto y no se produjo hasta finales de los años ochenta. «Podríamos decir que en los noventa comenzó la desregulación financiera».

Por otro lado, resalta que durante la etapa expansiva, uno de cada tres empleos de Europa se crearon en España, un hecho que fue parejo al incremento de las tasas de abandono escolar. «Todo ello generó un modelo productivo del que seguimos siendo rehenes».

tracking