Interactivo | La sexta ola deja 43 municipios en riesgo extremo
los datos de la pandemia por municipios
GRÁFICO: MIGUEL ÁNGEL ALONSO
La sexta ola avanza en León con 43 municipios en riesgo extremo, entre ellos la capital leonesa (578 casos por 100.000 habitantes) y San Andrés del Rabanedo (540). Con récord de casos positivos en la última jornada (250) desde que se inició la nueva onda pandémica en noviembre, la provincia alcanzó una incidencia de 494,4 casos, al borde de los 500 que marcan el riesgo extremo según el nuevo semáforo covid. La evolución del mapa de incidencia de la provincia desde primeros de noviembre hasta ahora muestra de manera gráfica cómo ha crecido la incidencia y el riesgo desde la primera semana de diciembre.
Además de los 43 municipios en riesgo muy alto o extremo hay 32 en riesgo alto, 34 en riesgo moderado, cuatro en bajo riesgo y 73 se mantienen en nueva normalidad coincidiendo con las zonas más despobladas de la provincia, al oeste la franja de Ancares, Villafranca y Cabrera, excepto Puente de Domingo Flórez, que está en riesgo medio y en la zona más central de la provincia Omaña, Cepeda y Maragatería son los reductos a donde la sexta ola aún no ha llegado, Otras islas sin covid se encuentran en la montaña oriental y central y sur de la provincia.
En la Comunidad, están en riesgo muy alto las provincias de Ávila (568,3), Burgos (539), Palencia (636) y Valladolid (821), mientras que León, Salamanca, Segovia, Soria y Zamora se encuentran en riesgo alto, según el baremo del semáforo covid actual, que establece el riesgo extremo a partir de los 500 casos por 100.000.
Las UCI de León, Palencia y Ávila son las que tienen más sobrecarga sobre la capacidad estructural y las tres se encuentran en riesgo extremo. La mayor tasa de ingresos por 100.000 habitantes en los últimos siete días se da en Valladolid y Zamora (14 por 100.000) seguidas por Burgos, León y Palencia, todas ellas con más de 10 ingresos por 100.000 habitantes en una semana.
La sexta ola está mostrando una virulencia en los contagios, pero menos presión hospitalaria y menos muertes que las olas anteriores. Los esfuerzos sanitarios se centran en mantener la atención a las otras patologías con la presión de covid controlada.