EDITORIAL: El agua que no llega al Órbigo

La polémica por la regulación del Órbigo, que prevé la construcción de las balsas del Rial y Los Morales en la comarca, vuelve a la palestra con la evidencia de que el Canal de Carrizo no tiene agua suficiente para completar el ciclo de riego, pese a que la reserva está muy por encima de la media de los diez últimos años. La oposición vecinal al proyecto a la que se suman también regantes de la zona con el argumento de que sus valles se inundarán para beneficiar al Páramo es cuando menos paradójica a la luz de los acontecimientos. Más allá de las razones que se esgrimen a favor y en contra, lo necesario es zanjar una situación que lleva décadas enquistada, algo en lo que están de acuerdo todas las partes. Es urgente que en los años más secos haya reservas para garantizar el abastecimiento y las cosechas en una provincia eminentemente agraria. De las varias soluciones planteadas, ya hay una firme en marcha. Quizás haya llegado el momento de analizar con más profundidad los pros y no tanto los contras y valorar qué pesa más en la balanza.