EDITORIAL | León debe buscar ser sede real del parlamentarismo

En la historia de Castilla y León figura una pugna ya zanjada para que la capital leonesa albergase las Cortes autonómicas. Durante un tiempo formó parte del debate político en la provincia, aunque la falta de decisión de los dos grandes partidos para impulsar esta iniciativa la condenó al fracaso. Años después, el reconocimiento como Cuna del Parlamentarismo hacia lo ocurrido en 1188 en San Isidoro llegó desde la Unesco y, quizá evidenció el error cometido en su momento, pero nadie debería dudar de que abrió una puerta hacia una nueva era por la que merece la pena trabajar. La reivindicación de León como punto emblemático en el camino de la construcción de la Democracia debe entenderse hoy como una oportunidad. Ayer mismo la ciudad fue la sede elegida para el primer Encuentro Parlamentario España–Estados Unidos, un foro organizado por The Hispanic Council y la Cámara de Comercio de León, que debería servir de modelo para promover eventos o atraer encuentros que tenga como eje la Democracia o el Parlamentarismo.

León ya tiene vínculos notables con Estados Unidos, a través de la Universidad de Washington, y la apertura al exterior en todos los órdenes es sinónimo de progreso y de oportunidades. Cultura, Parlamentarismo y Democracia son herramientas útiles que facilitan fórmulas para ganar presencia en el mundo.