Consumo alerta de que 7 de cada 10 descuentos digitales de ‘Black Friday’ son falsos
Rebajas de un viernes que son un tongo
La Dirección General de Comercio advierte a los ciudadanos que presten mucha atención a sus compras de 'Black Friday', el período de grandes ofertas digitales entre este viernes y el próximo lunes, porque la mayoría de las supuestas rebajas son falsas o cuando menos engañosas. Esa fue la contundente conclusión de la investigación realizada el año pasado por estas mismas fechas por el Observatorio de Consumo en Internet, un organismo de vigilancia puesto en marcha por el Ministerio de Derechos Sociales y Consumo.
Los técnicos del ministerio que dirige Pablo Bustinduy monitorizaron entre el 23 de septiembre y el 20 de diciembre de 2023 más de 800 productos con descuento anunciados por 19 comercializadoras digitales de distintos sectores, para comprobar la transparencia en la información que dan al ciudadano y el cumplimiento de las normas de protección al consumidor, especialmente la veracidad de las rebajas. La conclusión fue que en el 70% de los casos violaron la legislación de protección al consumidor con promociones que en realidad no lo eran, motivo por el que el ministerio abrió ocho expedientes sancionadores contra otros tantos grandes comercios electrónicos por estas irregularidades, seis de los cuales siguen aún en proceso de instrucción, pero dos ya han concluido con la imposición de sanciones por valor de 90.000 euros. El departamento dirigido por Bustinduy apercibió a las tiendas y plataformas digitales con el aviso de multas de hasta 100.000 euros si este 'Black Friday', en el que el observatorio realiza una monitorización similar, repiten las infracciones.
Los resultados del estudio reflejaron cómo muchas de las ofertas de 2023 no cumplían la ley, en especial la que vigila las prácticas comerciales desleales y las reducciones de precios. Las ofertas se anunciaban como transacciones más ventajosas de lo que realmente eran, llegando a promocionarse con precios iguales a los ofrecidos en otros periodos del año. Las infracciones más frecuentes detectadas por el Observatorio de Consumo en Internet en el 'Black Friday' 2023 fueron cuatro. La principal, la manipulación del precio de referencia, el que se supone que tiene el producto cuando se vende sin promociones, sobre el que se aplica la rebaja. La ley dice que este precio debe ser el más bajo en los anteriores 30 días, algo que no se cumplió en el 70% de los casos. Esto se traduce, por ejemplo, en subidas de precio unos días antes del periodo de rebajas para reducir los luego durante el 'Black Friday', etiquetando estos productos como "ofertados" o "descontados" sin serlo.
Otra de las irregularidades son las ofertas falsas con códigos y cupones, en las que se detectó una tasa de incumplimientos del 65%. La casuística más común es similar a la anterior, se ofertan productos a un precio concreto que se eleva artificialmente a la par que se proporcionan cupones de descuento, dando la sensación de obtener un precio ventajoso cuando en realidad no lo es.
Comparaciones inventadas La tercera gran infracción es la información engañosa, en especial sobre oportunidades temporales falsas. La mitad de las afirmaciones comerciales relacionadas con el precio fueron engañosas. El ejemplo más característico es cuando nos encontramos con afirmaciones de ofertas que aparentemente estarán vigentes un corto periodo de tiempo ("Solo hoy", "Oferta válida las siguientes 24h") cuando, finalizado ese plazo, el precio de adquisición se mantiene y esta limitación de tiempo falsa impulsa a una compra compulsiva.
La cuarta gran irregularidad son las comparaciones de precios engañosas, al no poner el precio de referencia. Es común la práctica de utilizar comparaciones de precios con formatos de descuento, trasladando una sensación de encontrarnos ante productos ofertados que en realidad no lo son. Se emplean etiquetas como "precio de venta al público", "precio recomendado" u otras similares como si fuesen los precios de referencia sin serlo. Estos precios aparecen tachados o con porcentajes de reducción a su lado dando la impresión de ser rebajas de precio, pero no son tales. Esta práctica induce a los consumidores a pensar que se encuentran ante ofertas ventajosas cuando solo se trata de comparaciones de diferentes precios cuyo origen o cálculo es desconocido para los consumidores. Un 25% de los productos analizados usaban precios distintos al precio legal de referencia establecido (el más bajo de los últimos 30 días).