Hamburtilla: la carne da la felicidad

Bajo el cartel de Hamburtilla. Frankfurt & Burger, en Alfredo Nistal, casi cuando remata la avenida de Nocedo, lo que hay es mucho más que una hamburguesería, porque es uno de esos establecimientos en los que nada más entrar se percibe el amor por la calidad hostelera y la amabilidad como herramienta inicial. Pero lo que ponen en valor Nelson Blanco y Génesis Solorzano son hamburguesas que tienen su propio relato. Son venezolanos y llevan cinco años en León, pero demuestran su implicación con esta tierra hasta en la propia carta de Hamburtilla, un establecimiento que además es franquiciable, por si alguien se anima.

Dentro de poco cumplirán un año al frente de Hamburtilla, un espacio que ofrece el placer de ver cómo se cocina en directo lo que se va a comer. Ese es el primer impacto para uno de los mandamientos que aparecen en su web: Somos felices. Los buenos momentos se viven en familia. Y ya pasando a la acción, por ejemplo, una hamburguesa de buey, con queso de Valdeón, como explosión de sabores, es demostración práctica de que Hamburtilla es un laboratorio del placer cercano, que además contribuye a la activa y dinámica vida del barrio. Hasta ocho tipos de hamburtillas, con su variedad de ingredientes, aparecen en esta excelente carta que cuenta con todos los complementos de estos locales de comida rápida pero que en este caso piden el disfrute tranquilo tanto en el local como en la modalidad take away. Pero Hamburtilla también trabaja otros conceptos como es el Hambur Kids, desde hace un mes, o el menú anti crisis. Y en este dinamismo, siempre en el contexto de la calidad, la carta ofrece días especiales de oferta a 7,90 euros. Y desayunos desde las 7.00 horas. La experiencia juega a favor de Nelson Blanco y Génesis Solorzano, una pareja perfecta con trayectoria en la hostelería en su Venezuela natal y en Colombia, y en el caso de Blanco, también en León. Como conectan sus hijas Verónica y Vera con León, esta última incluso leonesa.