Diario de León

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Dentro de un año, elecciones. No me extrañaría nada que este gatillazo que ha sufrido el presidente de la Junta termine en un coito interrumpido en mayo de 2023. Aconsejaba ayer Francisco Igea a Mañueco que toreara el toro de Vox: «Alfonso, bailalo», le decía con sorna desde el gallinero de las Cortes, donde alguno de los procuradores demostró su cachondeo votando  twice.  Hubo que repetirlo, casi como los comicios, que — on the record—  la decisión final se tomó quince minutos antes de la fumata blanca. Los de Soria Ya! están que trinan porque les mantuvieron en ascuas hasta el último momento y no es plan. Hay que recordarles que algo así pasó con la negociación de Por Ávila, que también se quedaron solos en la pista de baile. Guapo de discoteca, llamaron tras la última reunión a Raúl de la Hoz. Y luego, ya saben, «Oye, Paco, que te acabo de cesar».

Llegó Carlos Pollán más chulo que un ocho por delante de Juan García-Gallardo. A los hombres se les nota mucho la bambolla y el paisano (el nuestro) ya interpretaba el papel de segunda autoridad de la Comunidad, la misma con la que quieren acabar. La política es así. Ahora será él, no creo, el que decidirá cuántas jornadas quedan para que el presidente deje de estar en funciones. Puede esperar hasta finales de mayo, pero ya verán como todo irá mucho más rápido, no vayamos a pensar que les gusta la molicie.

Pollán tendrá que superar a Luis Fuentes, leonés de Salamanca, aunque tampoco es muy difícil: basta con ponerse un poco menos retufado.

Queda por saber si el vicepresidente  in pectore  elegirá consejerías en las que lucir o en las que demostrar. Han estado hablando de Agricultura, Familia e Industria, pero con la pobreza que nos viene con la guerra, yo me quitaría de encima la primera y la última, no sea que al final se vea que en este rincón del mundo se puede lo que se puede, más bien poco. Queda por ver cómo será la convivencia de grupo de UPL y Soria Ya, dos partidos que en principio no tendrían por qué discutir demasiado, aunque los pobres siempre se pelean.

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