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Editorial | Los cónclaves de PP y UPL en León y del PSOE en Burgos apuntan a elecciones

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La intensidad de la agenda política viene a constatar que Castilla y León ya está inmersa en una campaña que desembocará previsiblemente en un adelanto electoral que no irá más allá de principios de la próxima primavera. El respaldo unívoco que el presidente del PP, Pablo Casado, ofreció ayer en León a Alfonso Fernández Mañueco, catapulta al presidente de la Junta hacia una cita con las urnas irreversible, aunque no especialmente deseada, ante el temor de que una nueva fractura en Ciudadanos pueda facilitar otro intento de moción de censura por parte del PSOE de Castilla y León en marzo. León, sede simultánea este sábado del Encuentro de presidentes provinciales e insulares del PP y del Congreso General de UPL para renovar a Luis Mariano Santos al frente de la Secretaría General, ha sido testigo directo de este informal pistoletazo de salida hacia las urnas. El otro enclave de referencia ha sido Burgos, donde el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respaldado al líder de los socialistas de Castilla y León, Luis Tudanca, para convertirse por tercera vez, en candidato a desbancar al PP de la Junta tras tres décadas de gobierno. Los acontecimientos se aceleran empujados por el ambiente general que se respira en la escena política nacional y que arrastra también a otras autonomías gobernadas por el PP, como la andaluza de Juanma Moreno, donde el rechazo a los Presupuestos autonómicos aboca a un adelanto electoral en esa comunidad y abre la puerta a un gobierno de PP y Vox ante la previsible desaparición de Ciudadanos.

Al igual que en Andalucía, en Castilla y León se plantea un escenario muy diferente al de los comicios autonómicos de 2019, con Cs, formación que ha sido clave para la gobernabilidad en la presente legislatura, enfrentada a la tesitura de pasar de gobernar a dar sus últimos coletazos. Hablando de escenarios, el despunte político de la España Vaciada ha llevado a que tanto el PP como el PSOE realizaran ayer desde sus respectivos cónclaves guiños de complicidad al movimiento que hay tras el concepto que engloba el descontento de las zonas despobladas. De camino a marzo aún hay citas relevantes como el congreso autonómico del PP para la reelección de Mañueco, que se celebrará en enero en León. Mientras tanto, este fin de semana ha quedado claro que hay campaña y se presenta intensa.

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