Editorial | Las Edades dan a Sahagún un buen impulso durante el próximo año

Acoger una exposición de Las Edades del Hombre está muy disputado. Parece lógico, con los datos en la mano sobre su capacidad para atraer visitantes y actividad económica. Es cierto que hoy las muestras nada tienen que ver con las primeras que se produjeron hace 33 años, que fueron literalmente multitudinarias. Pero su reformulación, con un carácter más local, le facilitan un éxito garantizado en cada edición, como pueden dar buena fe Ponferrada y Astorga, con casi medio millón de visitantes cada una, o la de la Catedral de León, con 980.000.

En esta ocasión, la 25.ª exposición de Las Edades se configuró en torno al Camino de Santiago, con una polémica triple sede centrada en Burgos, Carrión de los Condes y Sahagún. Ahora, la muestra no tendrá continuidad en la catedral burgalesa, pero sí en las dos villas de Palencia y León, que tan emblemáticas son dentro de la Ruta Jacobea.

Durante unas semanas, la exposición permanecerá cerrada para reconstruirse con nuevas piezas al concluir los periodos de cesiones. Para Sahagún supone una oportunidad de oro para atraer visitantes durante el próximo año, especialmente en los meses de verano, e incluso para animar a quienes ya la conocen a repetir ya que facilitará nuevas experiencias.

En la provincia sigue pendiente la exposición en Villafranca del Bierzo, tantas veces demandada y que nunca ha llegado a concretarse.