Editorial | Un exitoso modelo para iniciativas en defensa del patrimonio histórico

La presencia romana en la provincia dejó huellas imborrables en el patrimonio histórico, cultural, artístico y de comunicaciones —sobre todo, aunque no sólo, en el eje transversal de la provincia— que va más allá de los orígenes de León, Lancia, Astorga... o Bergidum, y por extensión a todo el Bierzo. Y, puestos allí, la referencia ineludible son Las Médulas y todo lo que supone esa impresionante obra de ingeniería.

La galería minera romana del Barranco del Górgora-Peña Infierna, ubicada en Montealegre, es uno de los más singulares y mejor conservados ejemplos de la explotación romana del oro del oeste de la provincia y, aunque quizá tarde, está siendo objeto de actuaciones por parte de la Consejería de Cultura y Turismo a través del programa AR&PA Territorio. Una inversión mínima por parte de la administración autonómica, 20.000 euros, y previamente un empeño personal enorme y un esfuerzo ingente por parte del ingeniero de minas Roberto Matías —apoyado también por la Diputación, el ayuntamiento y la junta vecinal—, posibilitó el desescombro, excavación arqueológica y adecuación de la mina de oro romana. En realidad una galería de 140 metros de largo horada a pico en roca y que ahora es transitable en dos tercios.

Es, sin duda, uno de los más singulares y mejor conservados ejemplos de la explotación romana subterránea del oro durante los siglos I y II. Y es, sobre todo, un magnífico ejemplo del éxito de ese programa que impulsa la participación ciudadana y la iniciativa social en la gestión del patrimonio cultural de la provincia con fórmulas de concertación público-privada y con mecanismos que permiten su valorización, preferentemente en nuestras áreas rurales, que toda-

vía esconden riquezas inimaginables como ésta.