Editorial | Un impulso al polo biofarmacéutico desde todos los ámbitos sociales

Apostar por los sectores con mayores potencialidades de futuro es, sin duda, uno de los puntales en los que debe reafirmar su futuro la sociedad leonesa. Y, por su tradición y por su vigor actual, el polo biofarmacéutico es uno de los sectores más esperanzadores que tiene la provincia. Se trata además de un campo con múltiples frentes, en el que la investigación y desarrollo están muy presentes, y en el que su ámbito de crecimiento queda si cabe más consolidado aún tras la presente pandemia que ha puesto en valor todo lo relacionado con el mundo sociosanitario.

León contará desde el próximo curso con dos nuevos títulos de Formación Profesional centrados en este ámbito. En los institutos Padre Isla y Giner de los Ríos se impartirán las enseñanzas de Fabricación de Productos farmacéuticos, biotecnológicos y afines, y de Laboratorio Clínico y Biomédico. De algún modo se completan los estudios de nivel universitario de Biología, Veterinaria y Biotecnología, y las ingenierías, que también ofertan salidas hacia estos ámbitos.

Desde algunos sectores minoritarios de la sociedad se ha intentado generar un falso debate sobre que la formación de los jóvenes centrada en los campos de mayor actividad económica es un gesto promovido por el ultracapitalismo que ataca a la libertad y algo así como al librepensamiento de los chavales. Afortunadamente la sociedad va por otro cauce y demanda una Formación Profesional que sea cada vez más eficaz, facilitando a las nuevas generaciones una preparación útil. Si además ocurre, como en este caso, que se les enseña trabajos con demanda en León, será una buena oportunidad para que no tengan que emigrar.