Editorial | Nunca fue tan fácil una solución para poner al día Gersul

El conflicto por la deuda de Gersul lleva demasiados años y urge una solución definitiva. Ahora, con un gobierno del mismo color en la Diputación y en los tres grandes ayuntamientos de la provincia (León, San Andrés del Rabanedo y Ponferrada), se entiende mal que las cosas sigan sin solventarse. El problema genera casi 55.000 euros de intereses de demora cada mes. Una cantidad nada despreciable que se deriva del incumplimiento de la sentencia judicial que allá por 2018 estableció la cantidad definitiva que debía abonarse a la UTE Legio VII que gestiona el centro de tratamiento de residuos de San Román de la Vega. A los ciudadanos se les exige un estricto cumplimiento de la ley y de las decisiones judiciales. Y por ello se entiende mal que una entidad pública como el consorcio, que agrupa a los ayuntamientos y a la Diputación, reciba toques de atención por desatender sus obligaciones.

Pero más allá del tortuoso camino que nos ha llevado a este momento, y a esta ingente deuda de 23 millones, cabe preguntarse cuáles son las premisas que guían a las entidades locales, todas gobernadas por el PSOE, para no facilitar las cosas a la Diputación que lidera históricamente el consorcio de las basuras. El coste para los ciudadanos por todo lo ocurrido hasta ahora, en buena parte heredado de gobiernos del PP, reclama una solución definitiva cuanto antes.