Editorial | Precariedad en los accesos a la estación

La estación de trenes de León sigue sin abrirse plenamente. A pesar de que hace un par de semanas se facilitó a los medios de comunicación —desde el Ayuntamiento y Adif— una foto aparentando que llegaba la ansiada normalidad, después de transcurrir más de un año desde que se acabaron las obras, lo cierto es que las cosas siguen en precario. El aparcamiento no ha sido abierto a los ciudadanos y los mismos problemas, especialmente en las frecuencias horarias de los trenes de Madrid, se mantienen, con vehículos buscando dónde situarse por los rincones para realizar tareas de carga y descarga. Y lo peor está en el acceso y la salida, con una regulación que se ve condicionada por la existencia de un buen número de semáforos que complican una circulación que debería ser fluida. Y que genera la imposibilidad de salir desde la estación sin verse dirigido hacia el centro de la ciudad. Una circunstancia realmente llamativa...

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