Editorial | Un reimpulso a la sanidad imprescindible

La crisis política vivida en las últimas semanas en Castilla y León, incluso con constantes augurios sobre un adelanto electoral, quizá haya restado repercusión al debate fundamental que está sobre la mesa y que aireó las diferencias entre Partido Popular y Ciudadanos en el gobierno de cohabitación: la reforma sanitaria. Los populares de Alfonso Fernández Mañueco se han desvinculado con rotundidad de la postura de los naranjas que lidera Francisco Igea con su consejera Verónica Casado como diana de los ataques llegados de todos los frentes. La acción unilateral de Casado para reforma la sanidad descarriló con total claridad en las Cortes. Pero el problema sigue ahí y precisa un esfuerzo de todos para darle solución. Con una población dispersa, envejecida y en descenso resulta imprescindible reordenar los recursos para mejorar la atención de todos los ciudadanos. Pero ese es el problema, hay que atender a todos.