Diario de León

Creado:

Actualizado:

Mañana, asistiré a la gala estrella del Festival Internacional Vive La Magia, en la que participan los mejores profesionales del mundo. Ya he contado aquí que de crío ideé un número de adivinación, que dado el escaso éxito que obtuvo me apartó hacia otras vocaciones. Reuní a unos amigos y, tras cobrarles un duro, pedí a uno de ellos que barajase, cortara y mostrase una carta a los demás, luego sin enseñármela la volviese a introducir y barajase de nuevo. Seguidamente, hice el típico movimiento con los dedos, musité palabras mágicas, saqué una carta y la mostré al auditorio, del que el más mayor no pasaba de los doce. Momento estelar. “¿A que no es esta?”, pregunté más que satisfecho. Todos contestaron al unísono: “Nooooo”. Segundos de silencio. El aplauso no llegaba. Más segundos de tenso mutismo. Empezaron a mirarme algo moscas. Uf. Se mascaba la tensión. Podían ser críos, pero no necesariamente pacíficos. Hice pomposas reverencias, esperando los vítores. Alguien gritó, con vocación de liderazgo: “¿Y la magia?”. Con nervios de acero, mi explicación fue clara y científica: “He adivinado que no era la carta, ¿no? Es magia, pero del revés”. Qué miradas, qué resoplidos, qué expresiones impropias en la edad de la inocencia… En fin, como el cliente siempre tiene razón, incluso cuando no la tiene, les devolví el importa de la entrada. Y hasta ahí mi currículo como mago. ¿A que usted no tiene un Picasso en casa? Pues esto también es adivinar. Qué querían por un duro, ¿verme sacar un elefante de la manga? Pero el espectáculo al que asistiré en el Auditorio es de verdad, cofre de espejismos maravillosos. Si piden un voluntario levantaré la mano, salvo para el número del serrucho; no por miedo, sino porque tengo cosquillas.

Qué gran labor la de nuestro Festival Internacional de Magia, que nos regresa a inocencias perdidas. Gracias, Juan Mayoral y Huang. ¿No os sobrará una baraja de adivinar del derecho y del revés? Nunca es tarde para retomar una vocación frustrada.

Mañana, durante dos horas, creeré que otra realidad es posible. Aplaudiré a rabiar, con las manos y con el corazón. Largo es el viaje desde la infancia, a la que sin darnos cuenta vamos regresando. Feliz 2023, querido lector.

tracking