Partido grande para equipo grande

No está siendo febrero nada propicio para un conjunto culturalista, que a sabiendas de ser el mes clave para certificar una de esas tres primeras posiciones, y marcar distancias con los rivales, que están en la pomada jugando esa partida, no ha hecho más que complicar esa clasificación tras los resultados obtenidos. Algo ocurre cuando hay que dar ese golpe de mano (en este caso de pie) en los enfrentamientos con los rivales directos, y es que ante partidos importantes el resultado es siempre negativo. Cuestión a estudiar! O ese sambenito ya es una de las identidades que el conjunto de la capital leonesa se ha colgado desde hace tiempo! No es producto de esta temporada, sino que ya son varias en las que esto parece una constante. Romper con esta carga es una prioridad, ya que lamentarse no tiene ningún recorrido.

Tres últimos partidos, dos en casa, y el bagaje no ha podido ser más pírrico, dos puntos. Tras la victoria en tierras carbayonas, los dos partidos siguientes en el Reino no han disipado duda alguna, cayendo en los mismos errores partido tras partido. Y es que cualquier jugada defensiva que se produzca en el área por muy aislada que sea, termina convirtiéndose en un serio peligro para la retaguardia culturalista, pagándolo en demasía. Si a esto unimos la falta de definición de cara a puerta, que es más que preocupante, el resultado no tiene parangón, aunque se quiera disfrazarlo. En la jornada pasada los males se han multiplicado ante un rival directo como el Burgos, donde la inferioridad demostrada ha quedado patente, y esto es lo que realmente es preocupante. ¿Está la Cultural para ser uno de los gallitos de esta categoría, o simplemente es una ficción?

Hoy otra prueba de fuego en tierras numantinas, donde si el resultado final no es positivo las alarmas no pararán de sonar. Su última visita deja un recuerdo bastante duro, con ese descenso de la división de plata. Hoy toca dar la vuelta a la historia y resarcirse. ¿Lo veremos?