Partido para rematar la faena

Tres son las jornadas que restan para el término de esta primera fase de competición y el camino a la consecución del primer objetivo está encauzado, ahora sólo falta rematar ese trabajo. Hoy es una buena oportunidad para ello y dejarlo encarrilado y a las puertas, para en los dos partidos siguientes poner la guinda al pastel. Un conjunto como la Cultural, que pretende ser uno de los grandes de este popurrí de equipos en esta categoría, donde el formato competitivo va dejando a cada uno de ellos en los distintos grupos que está estructurado este sistema, debe marcar su entidad con la solvencia que la calidad de la plantilla atesora, a través de lograr los triunfos cuando son necesarios. La diferencia de un grande se basa en esto, primando los resultados por encima de cualquier otra circunstancia.

Después de ese golpe de mano en tierras sorianas y el descanso del pasado fin de semana, el Reino de León vuelve a ser el escenario del conjunto culturalista ante un Langreo que se juega su último cartucho. Hasta el momento los partidos de casa siguen siendo la asignatura pendiente del conjunto que dirige Idiakez, y esta tarde es la hora de cambiarlo, y empezar a construir un fortín de cara a lo que queda por venir. No se deben dar más concesiones a equipos que siendo de un potencial inferior logran llevarse algo positivo a sus huestes, merodeando un runrún en el ambiente que crea muchas dudas, según van transcurriendo los minutos.

No cerrar los partidos, fallar demasiadas ocasiones con esa falta de puntería, están penalizando con creces a una Cultural, que paga esa carencia de definición y el más mínimo descuido defensivo, con la pérdida de puntos que en situación normal no debiera ocurrir. Tiempo ha habido y los hechos son bien recientes para haberlos estudiado y corregir esos errores, empezando a ofrecer a la afición esas sensaciones de seguridad, solidez y solvencia, de un conjunto construido para marcar diferencias y llegar a cotas altas. Eso se ha vendido, ahora toca refrendarlo.