Un pie maragato en Madrid
Añino Regina Merina, con taller en Villalibre de Somoza, participa en la CSMW, la semana de la moda sostenible de Madrid, con su calzado hecho con lana merina
Iciar Martín Aresti con calzado de Añino Regina Merina en la feria de Moreda.
Añino Regina Merina pone un pie maragato en Madrid. La marca que utiliza lana para fabricar calzado y otros complementos de forma artesanal en un pueblo de la Maragatería, participa este jueves en la CSFW, la semana dedicada a la moda sostenible que se desarrolla en Madrid del 21 al 26 de abril. Impulsada por la astur-leonesa Iciar Martín Aresti y con la participación del artesano Antonio Milara Mendoza, Añino Regina Merina lleva en su nombre un tributo a la primera lana que dan las corderas (añino), a la reina Urraca de León (Regina) y a las merinas, las reinas de la trashumancia.
En la feria madrileña participan 19 diseñadoras y productoras especialistas en Moda Circular y Sostenible de diferentes países, cuyo objetivo es «utilizar las herramientas que otorga el sector para generar impactos medio ambientales y sociales positivos y mostrarlo en las distintas pasarelas», señala Iciar Martín Aresti.
Añino Merina presenta en este espacio su nueva colección de calzado biológico y complementos 100% orgánicos y biodegradables, junto a una innovadora nueva colección de tejidos naturales.
La marca leonesa, que tiene parte de su taller en Villalibre de Somoza, colabora en la pasarela de Eco diseño y Pasarela 17 con la marca Ángel Iglesias, dos hermanos zamoranos que, como señala la emprendedora, «está en la cañada».
Estas telas se presentan en «patrones atemporales, sencillos y bien estructurados». «Son el soporte perfecto para mostrar la caída y suavidad de los tejidos de lana merina blanca y su variedad negra 100% orgánicos y exentos de poliamida», explica.
La Pasarela Eco diseño se celebra a lo largo de la jornada de este jueves 24 de abril en el Espacio Domenico Scarlati.
La Pasarela 17, que consiste en «una iniciativa participativa donde colaboramos todas con todas, unidas con el objetivo en común de la sostenibilidad en la moda» celebra otro desfile el día 26 de abril en la Universidad de Nebrija.
Añino Merina pone en valor la trazabilidad de la lana de oveja merina. Esta empresa, con taller en León, tiene una alianza con un ganadero extremo para la adquisición de la lana, el «alma mater» del proyecto.
La elaboración de los zapatos se comienza con la elección de las fibras en establo y el siguiente paso es el lavado en ecológico. El hilado y tejido de las piezas está custodiado por Añino Merina, «se podría decir que desde la majada a la pasarela», recalca Iciar Martín Aresti.
Los diseños de las prendas corren a cargo de la marca Ángel Iglesias, dos hermanos zamoranos, que se han especializado en el manejo de estos tejidos cien por cien orgánicos y «cuyo comportamiento a la hora de trabajar con ellos es diferente, más complicado pero más noble».
El impulso de esta colaboración consiste en que a ambos proyectos les vincula un objetivo a largo plazo: hacer de la moda una herramienta de cambio en el cuidado de los suelos, del empleo y comercio local y de la producción artesanal.
La economía social circula con la lana entre León y Extramadura, como lo hizo la trashumancia durante siglos, y ahora hace parada en Madrid para exponer sus productos y defender la compatibilidad entre medio ambiente y desarrollo sostenible, estableciendo dinámicas de cooperación local y global.