Una ilusión renovada

Bodegas Gordonzello es la ilusión de todo un pueblo que en la última década del pasado siglo se involucró en la aventura de un proyecto que hoy se ha convertido en santo y seña de la producción vitivinícola y líder indiscutible de la Denominación de Origen León.

La historia de Gordonzello está unida a la recuperación de la viticultura local. Fue en 1995 y tras un proceso de reconcentración parcelaria, cuando 101 propietarios de Gordoncillo se agruparon para dar forma a una nueva empresa que, con la forma de sociedad anónima, aportaron capital y terrenos con el objetivo de «plantar viñedo y elaborar el mejor vino del mundo». Cedieron 550 fincas que suman 305 hectáreas, repartidas en dos grandes áreas. En 1996 se inició la plantación del viñedo de 205 hectáreas con las variedades de uva tinta Prieto Picudo, Tempranillo y Mencía, y las blancas Albarín y Verdejo. Las otras 100 se destinaron a la agricultura convencional.

En 1999 se realizó la primera vendimia que culminó con la elaboración de su primer vino, ‘Inicio’, un rosado 100% Prieto Picudo del que salieron 20.000 botellas. En 2002 comenzó a elaborar en sus propias instalaciones. Tres años después ya alcanzó las 200.000 botellas y en 2007 sus vinos lograban la calificación de la entonces Denominación de Origen Tierra de León, hoy DO León. Actualmente, Gordonzello es la bodega líder de la DO León, con una cuota de mercado de aproximadamente el 25%, con una producción anual de más de un millón de botellas, aunque según manifiesta su director-gerente, José Manuel Fernández, «nuestro objetivo no es el volumen, sino ofrecer un producto de calidad».

Gordonzello culmina este año con la celebración de su 25 aniversario con la renovación y ampliación de sus instalaciones, que ahora cuentan con una superficie de más de 7.000 metros cuadrados en los que se incluye una zona de embotellado, una amplia tienda, una nueva sala de catas, un salón multifuncional de 400 metros y un espectacular mirador con vistas a las plantaciones, el Museo de las Variedades y desde el que también se puede contemplar el pueblo de Gordoncillo. Además, la bodega ha lanzado un vino Edición Especial, ‘La Costana 25º Aniversario’, un tinto crianza, 100% Prieto Picudo, del pago La Costana, con un envejecimiento de más de 12 meses en barrica. Un vino exclusivo que aún puede adquirirse en sus tiendas física y online.

Las variedades de uva autóctonas Albarín para los blancos y Prieto Picudo para los rosados y tintos son la decidida apuesta de la casa.

Los orígenes están presentes nada más llegar a la bodega ya que un gran lema en la fachada recibe al visitante: «Sin olvidar y aprendiendo de nuestra historia, trabajamos nuestro presente, construyendo nuestro futuro». Y es que Gordonzello cuenta, además, con un proyecto de desarrollo rural a través del enoturismo, que ofrece diferentes experiencias en torno al vino. La bodega permite disfrutar de una completa visita enológica por el Museo de las Variedades, sus plantaciones, la zona de elaboración y crianza, el Centro de Interpretación de la Viña y el Vino y finalizar con degustaciones de sus vinos con catas técnicas o de iniciación con una agenda que puede completarse con un menú regado por los vinos Gordonzello. Además su amplio salón multifuncional de 400 metros puede ser alquilado para todo tipo de eventos.

Después de 25 años se cumple el sueño de un pueblo que ha recuperado sus vides con esfuerzo e ilusión, solventando dificultades, cosechando éxitos y trabajando por un futuro prometedor. Pasen y vean. Déjense guiar.