«La fórmula cambia para poder ayudar»

Si es tiempo de reinventarse, a Silvia Antón le ha tocado incluso dentro de su propio trabajo. Se trata de atender las necesidades de la clientela. Y en El Corte Inglés esa filosofía va implícita en el primer mandamiento. «Al empezar a tener que trabajar en estas condiciones, me pasaron a esta nueva forma en la que estamos sirviendo nuestros productos a domicilio», explica al hilo de lo que también supone un cambio sustancial en estos centros comerciales aunque ya se estuviera empezando a implementar.

Al menos, para Silvia Antón este cambio le toca hacerlo con 26 años que tiene y la experiencia de 4 años en el departamento de marketing de El Corte Inglés. «Atendemos pedidos por teléfono. Algunos relacionados con el teletrabajo que le está tocando hacer a tanta gente. Pero se trata de cambiar la fórmula y ayudar a la gente», dice.

Y por lo que se ve en directo, ataviados con todas las medidas de seguridad, ese ayudar a la gente consiste en hacer de todo. Porque los pedidos ahí están, pero el proceso comienza cuando el cliente solicita algo. Y luego, por supuesto, en esa cadena en la que todos arriman el hombro, el último eslabón es cuando suena el timbre del comprador.

Otro asunto es cómo se adapta el cliente no acostumbrado a este sistema, o que ni siquiera se planteó nunca utilizar. «Sí que se nota que hay quienes nunca han comprado así. Les ayudamos porque hay quien es la primera vez que realizan una llamada de estas características. Pero también creo que la gente se adapta a todo», asegura Antón.

Luego ocurre que cada día es diferente en esta nueva situación y es entonces cuando se confirma que el mejor respaldo es el factor equipo. «El ambiente de trabajo es muy bueno. Y tenemos la sensación de que somos un equipo. Al principio había más tensión, porque la verdad ver las plantas vacías, cerradas al público, impresiona tanto», afirma.