La antigua MSP quiere ser el nexo del patrimonio minero
Los edificios y su entorno fueron declarados ayer como BIC
Arsenio Terrón y Yasodhara López. L. DE LA MATA
Arsenio Terrón, director general de la Fundación Ciuden, y Yasodhara López, directora de la Fábrica de la Luz. Museo de la Energía, mostraron su felicidad ayer tras la declaración como Bien de Interés cultural de todo el conjunto histórico de la MSP, poniendo en valor la restauración y el trabajo de mantenimiento del día a día. Coincidían ambos en que este logro no ha sido sino una carrera de fondo, con trabajos encaminados a conseguirlo desde 2014, ocho años atrás.
Su objetivo, según Terrón, es crear un discurso histórico común que ponga de relieve la importancia de lo que supuso la minería en los últimos 100 años en las provincias de León y Palencia. Se intentará para ello que esta MSP sea el nexo de unión, el punto central sobre el que pivote el discurso de valorización, «sabemos lo que fuimos, sabemos lo que somos ahora y hacia dónde tenemos que tender pero creo que un pueblo que reconoce su pasado está más preparado para luchar por un futuro, ahora diferente pero ligado a la energía como es este BIC». En 2021 ya fue también declarada como tal la Cuenca Minera de Fabero.
Ese mismo argumento usaban ante la posibilidad de que la Recuelga se declare también BIC. Así, decía Terrón que no tiene tanta importancia ir declarando puntos aislados, «repitiendo la misma historia 1000 veces, sino complementar actuaciones y que al visitante no le baste, si quiere conocer la historia de la minería española, con estar en esta central, que se vea obligado a ir a Fabero, por ejemplo».
Esta declaración dará acceso al conjunto a ayuda técnica para la conservación de los edificios y anexos. Y aunque dicen no tener ninguna obra principal en mente, puesto que se acaban de restaurar las fachadas, esta nueva ayuda de técnicos formados podrá servir para la conservación de los hierros del interior de la central, tanto a nivel de asesoramiento como de actuación directa.
Por otro lado, significará también limitaciones en cuanto a obras, que se tendrán que consultar siempre con el Instituto de Patrimonio Cultural Español, algo que sin embargo ya se venía respetando desde que se recuperó la central, lo cual se tuvo muy en cuenta a la hora de otorgar la distinción. «Todas las actuaciones de rehabilitación que se han hecho ya las hicimos como si fueramos BIC». No significará, sin embargo, limitaciones de visitas.
En cuanto a los Planes de Transición a energías renovables, Terrón afirmaba que siguen «avanzando en el día a día». Recalcaba asimismo su importancia más que nunca dada la coyuntura internacional de dependencia energética del gas ruso. Comentaba que, sin embargo y agravado por la situación actual, es un proceso lento. Su finalización, que estaba prevista para 2023, podría tener que retrasarse hasta el año 24, momento en que el sector privado podrá rentabilizarlos.