Infraestructuras
Quiroga: «Hay un compromiso firme» para derribar la presa de San Facundo
El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil achaca las dudas a un «malentendido» sobre la nueva concesión de agua
La presa de San Facundo, en el año 2009 tras un desembalse de lodo que causó una mortandad de peces en el río Argutorio. LDM
«Hay un compromiso firme de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para demoler esa infraestructura que está colmatada en un ochenta por ciento, que es inservible y está obsoleta y que no cumple la función para la cual fue levantada». Con estas palabras, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS), José Antonio Quiroga, ha tratado de despejar cualquier duda sobre la posibilidad de que el organismo dependiente del Ministerio de Transición Ecológica cambie de planes y renuncie a invertir 2,3 millones de euros en derribar la polémica presa de San Facundo, situada dentro del municipio de Torre del Bierzo y levantada por la Diputación de León en los años ochenta para abastecer de agua al vecino municipio de Bembibre; un embalse que se encuentra en situación irregular y que, como reconoce el propio Quiroga en declaraciones a este periódico, «no cumple ninguna función» en la actualidad porque los lodos del río Argutorio o arroyo del Real la tienen prácticamente colmatada.
«El compromiso es firme, está incluido en el plan de medidas y figura también dentro de las medidas del fondo del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia», subrayó.
«Un malentendido»
El presidente del organismo hidrográfico atribuyo las dudas a «un malentendido» al interpretar los términos de la nueva concesión de agua que la CHMS ha concedido a la mancomunidad creada por Bembibre y Castropodame para gestionar la captación de agua a los dos municipios desde el pantano de Bárcena, que hasta ahora también se encontraba en situación irregular y ha sido por fin legalizada.
Presa inservible
«Este supuesto malentendido nace por la comunicación de la concesión de agua a Bembibre y la Mancomunidad», explicó Quiroga Como adelantó este periódico, el presidente de la CHMS reconoció que en la resolución que apruba la nueva concesión «figura una cláusula donde aparece explicitada que el propietario de la presa, al recibir la concesión de agua de Bárcena debe demoler dicha infraestrucutura obsoleta», pero también «matiza que en el caso de que no lo haga la Confederación Hidrográfica Miño Sil». En ese caso, la resolución establece que el Ayuntamiento de Bembibre debería presentar un proyecto de fin de puesta en servicio de la presa en un periodo de seis meses desde que la CHMS notificara la «imposibilidad» de llevar a cabo la obra. Algo que no sucederá, insistió ayer José Antonio Quiroga para alivio, sobre todo, del Ayuntamiento de Bembibre.