Caminos paralelos

león

Veinte artistas forasteros y un leonés, Pablo García, hacen una propuesta de modernidad en las dos exposiciones que actualmente pueden verse en el Albéitar universitario. En sus salas conviven las infografías del joven autor leonés y las variadas obras de los creadores seleccionados en la Muestra de Artes Visuales del Injuve. Vivimos en el tiempo perfecto para intentar convertirnos en nuevos Frankenstein, sin necesidad de buscar los elementos para construir a nuestros hombres nuevos en lugares macabros. Ahora, gracias a las técnicas digitales, podemos llevar a la realidad nuestras pesadillas inventando monstruos gráficos a partir de de segmentos de fotografías sacadas de las infinitas memorias de imágenes de nuestro ordenador.

Hacerlo con arte ya es cuestión más delicada, para eso hay que ser un consumado fotógrafo y un experto en el manejo del Photoshop. Pablo García García, es un artista que vive momentos de éxito y que ha querido llevar al Albéitar una muestra de sus últimos trabajos.

Un Desiderátum de monstruos creados a través del collage digital y que el artista ha convertido en auténtico retratos del barroco. «Me interesaba mucho -”explica-” convertir estas elucubraciones, pesadillas o ensoñaciones en algo muy pictórico, recordando a los maestros del barroco español. Por eso he realizado las impresiones digitales sobre lienzo y las he enmarcado con todo el clasicismo posible».

Las obras de Pablo García funcionan en conjunto, en grupos que se complementan. «He tratado -”explica-” de crear una especie de retablos en los que las ideas se completan». Así nos encontramos con un gran panel con seis retratos inventados en los que el protagonista es la guerra y los iconos empleados son extraños militares capaces de portar claveles en su boca e, incluso, de convertirse en feroces simios uniformados.

En la exposición de Pablo hay también juguetes rotos, extrañas y misteriosas muñecas y hombres que se pierden en la neblina del desenfoque fotográfico. En definitiva un ejercicio de virtuosismo en el que hay que profundizar para conocer las complicaciones técnicas requeridas para su realización.

En la muestra del Injuve, tienen cabida todas las técnicas y todos los estilos, aunque destacan las obras fotográficas. Así nos encontramos con dos impresionantes fotos murales de Isabel Tallos en las que resalta un maravilloso empleo de la luz y la sabia unión de la geometría y la figura humana.

Por su parte Marina R. Vargas presenta unas fotografías en las que predominan los colores, especialmente los rojos y dorados, en unas composiciones muy estudiadas que combinan las figuras de una mujer y un caballo con marcados signos orientales. De espectaculares se pueden calificar las composiciones digitales en Zoé T. Vizcaíno, que hace convivir serenos paisajes con impactos que percuten sobre el agua. O los delicados bordados de Irma Marco llenos de originalidad. Así hasta más de veinte jóvenes artistas que presentan una acertada visión de los nuevos caminos del arte español.

Lugar: El Albéitar.

Horario: de lunes a viernes, de 12.00 a 14.00 y de 18.30 a 20.30.